El aprovechamiento e implementación de avances tecnológicos adecuados pueden marcar la diferencia en el mundo corporativo y puede proyectar a una empresa hacia el éxito gracias a que propician una alta visibilidad administrativa, un mejor control de la empresa y sobre todo un mayor crecimiento del negocio. De acuerdo con el Instituto Nacional del Emprendedor (Inadem), uno de los puntos clave para que una pequeña o mediana empresa (Pyme) sea exitosa, es el uso de herramientas especializadas para tareas que necesitan ser organizadas, planificadas y ejecutadas con la mayor eficiencia posible. En el área financiera las herramientas digitales pueden aportar mayor visibilidad y control de los recursos, además simplificar los procesos administrativos para que empresarios puedan enfocarse en las decisiones estratégicas que harán crecer su negocio.
“Hoy más que nunca las diferentes industrias dependen del mundo digital para acceder a soluciones que, además de atender su seguridad y eficiencia, impulsen una evolución inteligente”, señaló Carlos Carriedo, vicepresidente y gerente general de American Express Global Commercial Payments Latinoamérica y Canadá.
Desafortunadamente, para muchas empresas la implementación de nuevas tecnologías ha significado un desafío muy grande y por ello, American Express diseñó vPayment, una solución totalmente digital que resuelve uno de los principales retos de las empresas, el pago a proveedores. Esta herramienta está enfocada en integrar y simplificar los procesos administrativos para brindar control y seguridad en el pago a proveedores, y así llevar a las empresas a una nueva era de las finanzas virtuales. Tiene la virtud de maximizar los recursos operativos y financieros, tanto de Pymes como de grandes empresas. Además, tiene la capacidad de resolver una situación común en el mundo corporativo y evolucionar del plástico a los pagos virtuales. Entre los beneficios que ofrece esta herramienta están: la seguridad digital de última generación en tecnología para asegurar los pagos; el control inteligente de pagos, es decir, la empresa decide cuánto dinero asigna a qué área, para qué gastos y por cuánto tiempo; y la administración digital, flexible y adaptable, pues es capaz de integrarse a las plataformas de finanzas de las empresas (ERP), así como de ajustarse a las necesidades de contenidos y formatos de cada negocio. Asimismo, ofrece conciliación simplificada, es decir, la visibilidad total de la información, que permite enriquecer cada cuenta virtual con criterios o campos personalizables como nombre de proyecto, número de factura, centro de costos y más. Con este tipo de herramientas las empresas pueden tener una migración exitosa de su proceso analógico al digital, esencial para reducir costos y para cubrir los requerimientos de los clientes finales, quienes cada vez exigen mayor calidad en sus servicios y menores tiempos de atención. ERC