Y ya que estés decidido, estos consejos te serán de gran utilidad y te mantendrán motivado cuando comiences a cosechar los primeros frutos:
1. Ahorra diariamente una cantidad mínima
La clave para iniciar tu patrimonio es empezar a ahorrar. Aun y cuando creas que tus ingresos son insuficientes, la verdad es que bien administrados te permitirán apartar por lo menos cantidades mínimas. Digamos que comienzas a guardar una moneda de 10 pesos cada día. Eso sumará 70 pesos a la semana y 300 al mes. Al cabo de un año, significarán 3,650 pesos. Es posible, ¿no?Otra opción sería que prescindieras de algún gasto superfluo al mes. ¿Cuánto gastas en una ida al cine? ¿O en un café diario de camino al trabajo?
2. Aparta un porcentaje de tu sueldo
Si tienes oportunidades como empleado, como una caja de ahorro corporativa, aprovéchalas. No sentirás el descuento y sí puedes obtener muchos beneficios, como un buen rendimiento o una aportación extra que ponga tu empresa.
“También puedes utilizar las apps bancarias o de otros servicios financieros para que automáticamente se traslade a tu cuenta de ahorros una cantidad que decidas ahorrar de tu sueldo”, comentan los expertos financieros.El monto puede ser tan pequeño o grande como tu presupuesto lo permita, pero la realidad es que, mientras no tengas acceso a ese dinero, no habrá oportunidad de gastarlo.
3. Utiliza fondos mutuos para invertir con capital bajo
“Como ya lo comentamos, es un mito lo de requerir de mucho dinero para iniciarte como inversionista. Y si no sabes nada sobre inversiones, no te preocupes, lo único que debes hacer es contratar un fondo mutuo, que es una opción de inversión diversificada cuyo riesgo solo varía dependiendo del tipo de activos en que se enfoquen”, explican los estrategas de Banco Base.
Según tu edad y tu meta financiera, puedes optar por un fondo mutuo enfocado en acciones de empresas tecnológicas, que conllevan cierto riesgo pero ofrecen mayores rendimientos a largo plazo, o en uno dedicado a la compra de bonos, que te dará más seguridad si tu meta financiera está próxima.
4. Deposita tus ahorros en una cuenta de banco
Guardar el dinero en casa, o “bajo el colchón”, es arriesgarlo no solo a un robo, sino también a que vaya perdiendo poder adquisitivo con el tiempo.Por ello, lo conveniente es que lo deposites en el banco. Puedes empezar con una cuenta de ahorros, que algo reditúan y, cuando ya tengas una buena suma ahorrada, pásalo a alguna cuenta de inversión.Los 100 pesos que guardes hoy, por efecto de la inflación, no te alcanzarán para comprar lo mismo dentro de un año. Es así de simple.
Si quieres otra opción segura, aunque de bajos rendimientos, están los pagarés bancarios, que son contratos mediante los cuales recibirás una tasa de rendimiento estipulada junto con tu capital al término del plazo.No pospongas la decisión de invertir. Empieza a hacerlo para cumplir tus metas financieras más pronto de lo que te imaginas. ct