“Hasta ahora la noticia ha sido interpretada como un esfuerzo de la administración de Trump por generar presión ante sus socios comerciales (México y Canadá) y adelantar las negociaciones, pues una notificación de salida daría inicio a un periodo de 6 meses antes de abandonar el tratado y podría acelerar un acuerdo. Sin embargo, la orden también abre la puerta a que Estados Unidos realmente pueda abandonar el acuerdo trilateral”, comentó Banco Base.La institución financiera destacó que una disolución del TLCAN no terminaría con el comercio en América del Norte, pero implicaría el regreso de aranceles bajo las reglas de la Organización Mundial de Comercio, lo que equivaldría a ineficiencias con costos para los consumidores de los tres países.
“Una salida del TLCAN también desincentivaría la Inversión Extranjera Directa entre países y afectaría el crecimiento económico”, advirtió.Adicionalmente, el gobierno estadounidense presentó su propuesta fiscal, la cual debe ser discutida por el Congreso. En ella se considera bajar impuestos a las empresas de 35 a 15% y simplificar trámites a los contribuyentes, entre otras cosas.