El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, hizo gala (otra vez) de su poder en Twitter esta mañana. En su cuenta amenazó a James Comey, exdirector de la Oficina Federal de Investigaciones (FBI), a quien le dio las gracias el pasado martes. “¡Más le vale a Comey que no haya ‘cintas’ de nuestras conversaciones antes de que se empiece a filtrar a la prensa! El pasado 9 de mayo, Trump despidió a Comey bajo el argumento de que carecía de capacidad para dirigir a la agencia federal. Comey, quien ha sido centro de controversia reciente por sus comentarios públicos, encabezaba la investigación federal sobre posibles colusión entre miembros del círculo de colaboradores de Trump con Rusia, para interferir en las elecciones del 8 de noviembre.
“Es esencial que busquemos un nuevo liderazgo en el FBI que restablezca la confianza pública en su vital misión del cumplimiento de la ley”, escribió Trump en una carta dirigida a Comey.
Un día después, el Presidente estadounidense defendió su decisión de despedirlo, anticipando el agradecimiento futuro de la clase política por su sorpresivo anuncio. “Comey perdió la confianza de casi todos en Washington, republicanos y demócratas juntos. Cuando las cosas se calmen, ellos me lo van a estar agradeciendo!”, dijo el mandatario en un mensaje en su cuenta de la red social Twitter. El 11 de mayo, el director en funciones del FBI, Andrew McCabe, contradijo públicamente las declaraciones de la Casa Blanca de que Comey había perdido el apoyo de sus subordinados. “La vasta mayoría de los empleados del FBI disfrutaba de una profunda y positiva conexión con el director Comey… Gozaba de amplio apoyo dentro del FBI y todavía lo tiene hasta este momento”, dijo McCabe en una audiencia ante el Comité de Inteligencia del Senado.