“Cuando están bien diseñadas, las APP pueden aportar una mayor eficiencia y sostenibilidad a los servicios públicos. A medida que la región deja atrás seis años de desaceleración económica, las APP pueden ayudar a estimular la inversión en infraestructura y fortalecer el impulso de crecimiento”, argumentó en un comunicado.El organismo financiero internacional señala que la mayoría de los países de la región mejoró sus marcos legales y de políticas APP en los últimos 20 años, en tanto que 17 países de la región ya cuentan con unidades de ese tipo plenamente operativas. En la actualidad, las APP representan aproximadamente 40% de los compromisos anuales en infraestructura de América Latina y el Caribe, y existe una gran variación entre países y en el tiempo. En los últimos 10 años, apunta el Banco Mundial, la mayor parte de las Asociaciones Público Privadas en la región fue de inversiones en nuevas instalaciones, principalmente en el sector energético.