Tras días de conflicto y un “jalón de orejas” público por parte del presidente Andrés Manuel López Obrador, el grupo parlamentario de Morena cedió la presidencia de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados a la bancada del PAN. Los morenistas optaron por detener la reforma que planeaban para la Ley Orgánica del Congreso, con la que habrían extendido el período de presidencia en la Mesa Directiva a año y medio. La decisión de Morena cierra el segundo conflicto en menos de dos semanas en torno a las dirigencias al interior del Congreso. La controversia inició el sábado cuando la bancada morenista rechazó al panista Xavier Azuara Zúñiga como próximo presidente de la Cámara de Diputados, restableciendo a Porfirio Muñoz Ledo como dirigente. Muñoz Ledo presentó su renuncia a la presidencia de la Mesa Directiva la noche del lunes, citando una posible “crisis constitucional” y asegurando que promovería el diálogo entre los grupos parlamentarios para alcanzar acuerdos sin controversia política. https://twitter.com/PMunozLedo/status/1169055379868852224 La mañana del miércoles, el mismo presidente López Obrador -quien es militante de Morena- describió el plan de reforma para la Ley del Congreso como una “vergüenza”.
“No se debe de modificar la ley en función de intereses personales o de grupos. No se puede retorcer la ley, hacer la ley a la medida, independientemente de dónde suceda”, declaró el presidente.
También hubo controversia en las elecciones para la presidencia del Senado. Mónica Fernández Balboa fue elegida tras un segundo proceso electoral, pues el senador Martí Batres Guadarrama acusó de una facción de su propio partido de haber interferido en el proceso para que se eligiera a Fernández Balboa.   Te puede interesar: La segunda es la vencida: Mónica Fernández es elegida presidenta del Senado cach