El Parlamento de Gran Bretaña rechazó abandonar la Unión Europea (UE), tras no lograr una mayoría de los votos por parte de los diputados, al contabilizarse 321 votos a favor y 278 en contra. Los diputados apoyaron una enmienda presentada por la conservadora Caroline Spelman, que demandó al Gobierno a descartar un Brexit duro en cualquier momento. Ante este panorama, la primera ministra, Theresa May, debe ahora buscar un aplazamiento, nuevamente del Brexit, opción que será sometida a votación el próximo jueves. En cualquier caso, no es vinculante -la ley británica del Brexit mantiene la fecha de separación para el próximo 29 de marzo-, pero sí retrata el único asunto en el que la Cámara puede ponerse de acuerdo, esto es, en el interés por pactar una salida con la Unión Europea. También te puede interesar: El final del Brexit podría sufrir un retraso. Por su parte, la UE señaló durante la jornada de hoy que solo autorizará una prórroga de la salida sí Gran Bretaña presenta un plan concreto, de modo que queda en manos de los diputados británicos encontrar una alternativa para ejecutar el Brexit. Ante esto, May insistió, de conseguir una prórroga en la UE, la única forma de impedir un Brexit duro en el futuro es que se apruebe un acuerdo o se cancele la salida de Gran Bretaña del bloque europeo. LP