Los precios al consumidor en Estados Unidos registraron un alza fuerte en abril, añadiendo al nerviosismo causado por la inflación y los efectos que podría tener sobre la recuperación económica.
El índice de precios al productor de Estados Unidos cerró abril con un alza mensual de 0.6% y un avance anual de 6.2%.
Este último superó las expectativas de los mercados, que esperaban un alza anual de 5.9%. Es además el octavo avance consecutivo en las comparaciones anuales para los precios al productor y su aumento más fuerte desde que comenzó la serie más reciente para el indicador en noviembre de 2010.
Los precios al productor en EU han registrado alzas importantes en lo que va del año. El indicador subió 1.7% en enero (a tasa anual), ascendió a 2.8% en febrero y brincó hasta 4.2% en marzo, cifra que sería superada en abril.
La inflación continúa escalando, generando preocupación entre analistas y operadores en los mercados. El índice de precios al consumidor para Estados Unidos subió 0.8% en abril a tasa mensual y 4.2% en su comparación anual, su brinco más fuerte desde septiembre de 2008; es decir, no se veía un alza tan fuerte en la inflación desde que estalló la crisis financiera global de 2008-2009.
“A los operadores les preocupa que este incremento pueda interrumpir la recuperación o incitar a los bancos centrales a retirar los estímulos monetarios”, apuntó Grupo CIBanco en un análisis publicado el jueves.
Las alzas en los índices de precios suceden después de un año de que estallara la pandemia del COVID-19, la cual trajo consigo una crisis económica que desestabilizó los precios a nivel global. Algunos productos se encarecieron por un colapso en la oferta mientras que otros vieron sus precios desplomarse por falta de demanda.
La pandemia parece estarse disipando en Estados Unidos, donde la campaña de vacunación contra el COVID avanza a paso acelerado y da a los gobiernos locales oportunidad de relajar las restricciones a la actividad económica. La recuperación está en camino, pero los avances en la inflación preocupan por su capacidad para atrofiar el proceso.
El progreso en los índices de precios determinarán el próximo movimiento de la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed). Funcionarios del banco central aseguran que la aguda tendencia al alza en la inflación es temporal, aunque habrá qué ver los datos para los próximos meses.
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