El Parlamento de la Unión Europea ha otorgado dos opciones de prórroga para el Brexit, las cuales procederán dependiendo de si Theresa May logra alcanzar un acuerdo de transición entre sus colegas. El presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, informó la noche del jueves que la primera ministra británica tendrá dos opciones de extensión  para el Brexit, que dependerán de si se alcanza un acuerdo de transición en el Parlamento inglés a más tardar la próxima semana:
  • Si hay acuerdo, la extensión será hasta el 22 de mayo
  • Si no hay acuerdo, la prórroga pasará al 12 de abril
“Esto quiere decir, en la práctica, que hasta esa fecha [12 de abril] todas las opciones permanecen abiertas, y la fecha límite quedará retrasada”, explicó Tusk en conferencia de prensa.
El funcionario dijo que la fecha, establecida durante la reunión celebrada por el Consejo Europeo este jueves, se escogió porque representa el límite de tiempo con el que cuenta Reino Unido para decidir si participa en las elecciones del Parlamento de la Unión Europea. Si no ha decidido para entonces, “la opción de una prórroga más larga se volverá imposible”. Por ahora, las autoridades del Reino Unido “aún tendrán la opción de un acuerdo o de ningún acuerdo, de una extensión larga o de una revocación del Artículo 50”, dijo Tusk en su pronunciamiento. Theresa May pidió ayer a las autoridades europeas que extendieran la fecha límite para el Brexit (29 de marzo de 2019) hasta el 30 de junio de este año, alegando que sería imposible preparar una nueva propuesta de transición y llevarla a voto ante congresistas británicos a nueve días de la fecha inicial. La petición de May llega tras meses de negociaciones difíciles con congresistas opositores al interior del Parlamento, quienes ya rechazaron dos de los acuerdos de transición presentados por la primera ministra. Estos mismos expresaron que no aceptarían un tercer acuerdo a menos que fuera “fundamentalmente distinto; no distinto en términos de lenguaje, sino distinto en términos sustanciales”. El Brexit es el nombre que se le dio al referéndum que tuvo lugar en junio de 2016 y  en el que los ciudadanos del Reino Unido votaron sobre su permanencia como parte de la Unión Europea. El voto a favor de una separación se llevó la victoria con 51.89%. A pesar de su divorcio político, ambas partes han buscado la manera de salvar su relación comercial post-Brexit.   Te puede interesar: Impone UE tercera multa a Google por comportamiento anti-competitivo cach