El gobierno de Estados Unidos designó oficialmente como organizaciones del terrorismo internacional a los cárteles de Sinaloa, de Jalisco Nueva Generación, del Noreste, del Golfo, la Nueva Familia Michoacana y al que se llama Cárteles Unidos, todos ellos mexicanos.
Asimismo, el gobierno norteamericano clasificó como organizaciones del terrorismo internacional al Tren de Aragua, de Venezuela, y a la Mara Salvatrucha, de la República del Salvador.
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El Departamento de Estado envió una notificación al Registro Federal —el diario oficial del gobierno estadounidense— para publicar formalmente esta información a partir de mañana 20 de febrero.
En cuanto se publique este acuerdo tendrá efectos legales.
Las consecuencias de esta designación son múltiples, ya que no solo implica que dichas organizaciones delictivas deberán ser perseguidas y proscritas en Estados Unidos, sino que también el gobierno de este país puede enfrentarlas fuera de su territorio.
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Asimismo, existen consecuencias de tipo económico, ya que el gobierno norteamericano se reserva el derecho de bloquear o confiscar los bienes materiales (cuentas bancarias, activos físicos) de las organizaciones terroristas.
Además, se sancionará a las personas, organizaciones, instituciones y gobiernos que cooperen con los grupos criminales terroristas, ya que igualmente se les podrán “congelar” sus cuentas bancarias y otros bienes, además de que se les podrán negar las visas para ingresar a Estados Unidos.
Antes de que se diera a conocer la notificación del Departamento de Estado de Estados Unidos al Registro Federal, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, expresó sus reservas sobre las implicaciones legales de la clasificación de los cárteles mexicanos como organizaciones terroristas.
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La mandataria mexicana hizo ver que su gobierno no aceptará que el gobierno norteamericano pretenda hacer incursiones militares en suelo nacional.
“Si ese decreto tiene que ver con acciones extraterritoriales esas no las aceptamos. Nosotros creemos que es indispensable avanzar en las investigaciones conjuntas del lavado de dinero, que son muy importantes porque la droga se vende en Estados Unidos, el recurso proviene de la venta de la droga”, dijo Claudia Sheinbaum.
“Si hacen este decreto para investigar el lavado de dinero y a los propios grupos delictivos que hacen la venta está muy bien, lo que nosotros nos aceptamos son acciones a nuestra soberanía”, advirtió la mandataria.
La declaratoria puede consultarse aquí.
GC
