El Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO) advirtió que la reciente reforma constitucional en materia energética (y sus leyes secundarias) no incentiva la inversión ni la eficiencia.

En un análisis, la institución señaló que uno de los elementos que más destaca de las iniciativas en materia de hidrocarburos es el nuevo régimen fiscal de Petróleos Mexicanos (Pemex), un derecho diseñado como regalía sin posibilidad de deducciones y “sin distinguir entre campos”.

En este sentido, hay pocos incentivos para la eficiencia y la inversión, apuntó el centro de investigación.

Según la reforma, los tres gravámenes que paga Pemex en la exploración y extracción de hidrocarburos (derecho de exploración, derecho de extracción de hidrocarburos y derecho por utilidad compartida) se consolidan en el Derecho Petrolero para el Bienestar, el cual operaría con diferentes tasas para el petróleo, gas asociado y sus condensados.

Así, cuando el precio del petróleo sea inferior a 57.8 dólares por barril se le aplicará la fórmula 30% + (0.1410 x precio del petróleo – 8.1433)%; cuando sea mayor o igual a 57.8 dólares, será 30% + (0.0629 x Precio del Petróleo – 3.6320)%.

Para el caso del gas no asociado y sus condensados las tasas serían: cuando el precio sea inferior a 57.8 dólares por barril, de 11.6264% + (0.0560 x Precio del Condensado – 3.2308)%; cuando el precio sea mayor o igual a 57.8 dólares, será de 11.6264% + (0.0392 x Precio del Condensado – 2.2625)%.

El porcentaje es elevado si se considera que las regalías por extracción de hidrocarburos a nivel mundial regularmente oscilan entre 12.5% y 15 por ciento”, expuso el IMCO.

Respecto a las posibilidades de inversión en exploración y producción de hidrocarburos, acentuó que el nuevo panorama proyecta que buena parte del éxito de las reformas en materia de hidrocarburos recaerá en la credibilidad y el atractivo de Pemex como socio.

Igualmente, en la capacidad del Gobierno Federal de ofrecer un horizonte de predictibilidad para la inversión de largo plazo.

Para Pemex, un reto central para aumentar su credibilidad es reducir su deuda con proveedores y contratistas, que al cierre del tercer trimestre de 2024 se ubicó en 402.9 mil millones de pesos”, resaltó.

Cabe mencionar que la iniciativa plantea tres figuras centrales para las actividades de exploración y producción de hidrocarburos, las asignaciones para desarrollo propio, las asignaciones para desarrollo mixto y los contratos para la exploración y extracción.

Sobre las asignaciones, destaca que Pemex mantendrá su control exclusivo, tanto las de desarrollo propio, donde la participación privada se encuentra limitada a contratos de servicios, como las de desarrollo mixto, donde la empresa podrá tener socios.

Para los contratos de asignaciones mixtas se contempla que la petrolera no realice aportaciones económicas directas. Además, Pemex deberá contar con una participación de al menos 40% en las asignaciones mixtas.

En relación a los contratos para la exploración y extracción, IMCO manifestó que, aunque se mantiene la posibilidad de licitarlos, “la prelación propuesta, donde las asignaciones de Pemex tienen preferencia, deja esta opción como la excepción”.

Esto puede ir en detrimento de las posibilidades de producción petrolera en la medida que, en lugar de establecerlos como excepción, cada contrato se debería regular de acuerdo a las necesidades específicas de cada yacimiento, incluyendo su nivel de riesgo”, opinó.

En materia de planeación y regulación, la institución mencionó que habría un potencial conflicto de interés, pues la Secretaría de Energía ocuparía tres de los ocho asientos del comité técnico de la nueva Comisión Nacional de Energía, al mismo tiempo que la titular de la dependencia mantendría la presidencia del consejo de administración de Pemex.

Bajo este contexto, el IMCO llamó al Senado de la República a discutir de forma profunda las iniciativas “con el objetivo de que estos instrumentos incentiven el desarrollo de nuevos campos de hidrocarburos y logren revertir el declive de la plataforma de producción de hidrocarburos del país, al mismo tiempo que se diversifiquen las fuentes de financiamiento”.

4 propuestas

Tras su análisis, el Instituto Mexicano para la Competitividad presentó una serie de propuestas:

  • Establecer que el instrumento para la exploración y extracción de hidrocarburos corresponda a las necesidades y nivel de riesgo específico de cada yacimiento.
  • Concentrar el otorgamiento de permisos para petrolíferos y gas natural en la Comisión Nacional de Energía.
  • Utilizar dos de los asientos de la Secretaría de Energía en el comité técnico de la Comisión Nacional de Energía para incorporar a representantes de las secretarías de Hacienda y Economía.
  • Mantener el reporte de estados financieros de Pemex desglosado a nivel unidades de operación para contar con información granular sobre la situación de cada área de la empresa.

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