Los gobiernos estatales de México han hecho en los últimos años un esfuerzo por mejorar su recaudación para aumentar sus ingresos propios. En 2020, 15.5% de los ingresos operativos provinieron de la recaudación local, proporción que aumentó a 19.2% al cierre de 2022.

“Este incremento en los ingresos propios es positivo desde el punto de vista crediticio, ya que brinda una mayor capacidad a los estados para fondear gastos operativos y de capital, al mismo tiempo que reduce la exposición de sus ingresos ante choques en las transferencias federales”, refirió Moody’s Local en el reporte “Mayor recaudación mejora el perfil crediticio de los estados”.

Te puede interesar: SAT identificó a 513 empresas incumplidas con certificaciones de IVA y IEPS

Para lograr este avance en la recaudación local, siete de 16 estados calificados por Moody’s Local México aplicaron ajustes a las tasas del Impuesto Sobre Nómina (ISN), lo que combinado con el crecimiento del empleo después de la pandemia del Covid-19, propició que el ISN creciera a una tasa media anual de 16.4% entre 2020 y 2022.

El ISN tiene una participación relevante, ya que aporta 43% de los ingresos propios de los estados.

Unos siete estados –Hidalgo, Yucatán, Querétaro, Guanajuato, Jalisco, Sonora y Nayarit— han modificado la tasa del ISN para ubicarla en torno a 3% en promedio, lo cual ha tenido lugar entre los años de 2020 y 2023, según cada caso.

Asimismo, los gobiernos estatales del país han diversificado sus fuentes de ingresos locales, al introducir “nuevas figuras tributarias” y al mejorar la cobranza de los impuestos, agregó Moody’s Local. Entre otras iniciativas, algunos gobiernos estatales han introducido impuestos ecológicos e impuestos sobre el hospedaje que se ofrece mediante plataformas digitales.

Te puede interesar: Captación de impuestos creció 3.9% en el primer semestre

Entre los impuestos ecológicos que se han introducido en los últimos años en los gobiernos locales se encuentran los que se aplican sobre la emisión de gases a la atmósfera, la extracción y aprovechamiento de materiales pétreos, las verificaciones vehiculares y venta de hologramas del programa Hoy no circula, la remediación ambiental por depósito o almacenamiento de residuos y la emisión de contaminantes en el agua, entre otros.

De esta manera, los ingresos por impuestos diferentes al ISN han crecido a una tasa compuesta de 12.1% entre los años 2018 y 2022, comentó el reporte.

El hecho de tener un mayor margen de cobro de impuestos por medios propios fortalece económicamente a los gobiernos locales y los protege de retrasos en las transferencias del gobierno federal, además de que mejora su perfil crediticio.

“Durante los primeros cinco meses del año, las participaciones observadas se han ubicado 7.1% por debajo de lo estimado en el presupuesto. Aunque estimamos que este rezago en las participaciones es temporal, los estados con una base de recaudación más amplia están mejor posicionados para absorber esta caída sin registrar un deterioro mayor en sus finanzas”, advirtió Moody’s Local.

Si bien se espera que este fortalecimiento en la capacidad de recaudación de las entidades federativas contribuirá a mejorar en adelante los ingresos propios, también se advierte que existen limitaciones que van a impedir un crecimiento más vigoroso en el futuro.

Aunque “hay estados que tienen margen para ajustar la tasa del ISN para fortalecer otros impuestos, creemos que existen limitaciones que pudieran acotar el crecimiento de la recaudación estatal. Las altas tasas de informalidad, el bajo crecimiento económico, debilidades en el marco institucional y la falta de incentivos políticos, son factores que pueden reducir el potencial de recaudación en algunas entidades”, concluyó el reporte.

GC