El gobierno mexicano considera la posibilidad de establecer un impuesto especial para los bancos, en aras de aumentar la recaudación de impuestos y, de esa manera, compensar el gasto público extraordinario del último año de la administración en turno.

Entre otras medidas, el gobierno mexicano considera la posibilidad de crear un impuesto para las ganancias extraordinarias de los bancos o bien limitar sus deducciones fiscales, según un reporte publicado hoy en el diario británico Financial Times, que fue retomado por la prensa mexicana.

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“Las opciones discutidas para los bancos incluyen restringir las deducciones fiscales e incluso imponer un impuesto a las ganancias extraordinarias, aunque esfuerzos como este último que requieren un cambio en la ley, son poco probables por ahora, dijeron tres personas familiarizadas con el tema”, refiere el reporte.

“Hay espacio para cargar más impuestos a los bancos”, dijeron las personas consultadas, cuyos nombres no se mencionaron.

El reporte también menciona que si Claudia Sheinbaum Pardo, candidata del oficialismo a la Presidencia de la República, gana las elecciones de junio próximo, enfrentará fuertes presiones para aplacar el déficit fiscal más alto del país que se tenga registrado desde 1980 y conducir las finanzas públicas por un camino de sostenibilidad.

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Un posible ajuste a los impuestos de los bancos contrasta con las declaraciones de la candidata del oficialismo, quien ha descartado la necesidad de emprender una reforma fiscal para aumentar la recaudación de impuestos y fortalecer las finanzas públicas.

El gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador dejará en el último año de su sexenio un déficit fiscal cercano a 5.9% del Producto Interno Bruto (PIB), debido al gasto extraordinario de 2024 para concluir las obras emblemáticas de la administración como el Tren Maya y la Refinería Olmeca, que todavía no ha comenzado operaciones comerciales.

El antecedente inmediato más alto se remonta al año 2014, cuando el gobierno del entonces presidente Enrique Peña Nieto provocó un déficit fiscal de 4.54% del PIB.

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De ahí que entre los analistas del sector privado y las agencias calificadoras han mencionado la relevancia de impulsar una reforma fiscal en el corto plazo, ante elevado déficit fiscal que heredará López Obrador a su sucesor, sea quien sea, y que enfrentará un primer año de gobierno con un recorte presupuestal de casi 1 billón de pesos.

GC