La calificadora Fitch Ratings degradó la calificación crediticia de Rusia de BBB a B, lo que significa grado especulativo, debido a las sanciones económicas que han aplicado Estados Unidos, la Unión Europea y otras regiones del mundo a dicho país, luego de invadir a su vecino Ucrania.
Asimismo, Fitch colocó la calificación de Rusia en observación negativa, al considerar que el país enfrenta un alto riesgo financiero, con posibilidades de caer en impagos.
“Las sanciones económicas representan un gran impacto para los fundamentos crediticios de Rusia y podría socavar su voluntad de pagar la deuda pública”, refirió la agencia.
Entre otras medidas, los castigos a Rusia han implicado desconectar a varios de sus bancos del sistema internacional SWIFT, para realizar transacciones con el extranjero. Pero también las disposiciones han alcanzado al Banco Central de Rusia.
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“Las sanciones anunciadas por Estados Unidos y la Unión Europea que prohíben realizar transacciones con el Banco Central de Rusia tendrá un mayor riesgo para los fundamentos crediticios de Rusia que cualquier castigo previo”, consideró Fitch.
Las malas noticias para este país también provienen de los organismos internacionales, ya que el Banco Mundial (BM) anunció este miércoles la suspensión con “efecto inmediato” de todos sus programas en Rusia por la invasión militar rusa de Ucrania.
Esta disposición también aplica a Bielorrusia, país aliado del gobierno ruso y que también coopera con la invasión.
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“Como consecuencia de la invasión rusa de Ucrania y las hostilidades contra el pueblo de Ucrania, el BM ha detenido todos sus programas en Rusia y Bielorrusia con efecto inmediato”, señaló el organismo en un comunicado.
La institución indicó que tenía aprobados nuevos préstamos a Rusia desde 2014, cuando Moscú invadió la península ucraniana de Crimea. (Con información de EFE)
GC
