Para 2017 Citibanamex anticipa una desaceleración económica en México, pero con diferencias marcadas a nivel regional. Su expectativa es que el Producto Interno Bruto (PIB) del país avance 1.7%, una expansión menor a la observada el año pasado (2.3%). En su informe Indicadores Regionales de Actividad Económica, prevé un mayor dinamismo en las entidades vinculadas al sector externo, vía producción manufacturera y turismo. Sin embargo, la ‘fortaleza’ que registra el mercado interno también va a beneficiar a estados más diversificados o más enfocados a servicios, como la Ciudad de México. En contraste, la menor producción petrolera esperada (la estima en 1.95 millones de barriles diarios en 2017 frente a 2.15 millones en 2016) seguirá afectando a estados como Tabasco y Campeche. De acuerdo con sus pronósticos, con excepción de Coahuila, Nayarit, Nuevo León, Oaxaca, Puebla, Querétaro, Tamaulipas y Zacatecas, el resto de las entidades (24) crecerá menos que en 2016 o arrojará números rojos. Quintana Roo (4.8%), Aguascalientes (4.5%) y Guanajuato (4.1%) son los estados que arrojarán el mayor crecimiento; en contraste, Campeche (-7.7%) y Tabasco (-3.7%) arrojarán la peor contracción. Éstas son las perspectivas para 2017: El reporte de Citibanamex destacó que en 2016 la economía nacional comenzó a observar un proceso de desaceleración, enmarcado por el deterioro del sector externo y en ‘clara oposición’ al dinámico mercado interno. El PIB creció 2.3% el año pasado, por debajo de 2.6% de 2015: “el continúo deterioro de la demanda externa se materializó en la caída de las exportaciones –medidas en dólares–, las cuales retrocedieron 1.8% en 2016, mientras las importaciones disminuyeron 2.1%. El bajo precio de los hidrocarburos, aunado al menor dinamismo de las exportaciones de manufacturas, incidieron en estos resultados”. A nivel estatal, refiere, prevalecieron comportamientos mixtos, los cuales persistirán para este 2017.