La oficial mayor de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), Raquel Buenrostro, indicó que el desabasto de medicinas y materiales de curación en algunas instituciones de salud del país, fue causado por una planeación deficiente por parte de la administración de Enrique Peña Nieto.
“Por mejores prácticas el Gobierno Federal debe planear las compras de medicamentos y materiales de curación desde un año previo. Lo anterior significa que el abasto de 2019 lo debió haber dejado garantizado la administración anterior. “Es decir, para todo el ejercicio 2019, la contratación se realizó desde noviembre de 2018. Sin embargo, la posible escasez de medicamentos y materiales de curación se debe a la planeación deficiente de 2018”, indicó la funcionaria.
En conferencia de prensa, refirió que, debido a esta mala práctica, la actual administración, mediante la Oficialía Mayor, se encuentra realizando un procedimiento de contratación para garantizar el abasto de medicinas del segundo semestre de 2019. En ese contexto, aclaró que nunca se había hecho una compra de manera consolidada a mitad del año para el propio ejercicio. Anteriormente, ante la escasez, se realizaban compras urgentes directamente desde las Delegaciones del IMSS, ISSSTE y hospitales con precios elevados”, detalló. Aseveró que para aprovechar la compra extraordinaria para el segundo semestre, la Secretaría de Salud, a través de la Comisión Nacional de Protección Social en Salud (Seguro Popular), suscribió acuerdos con 22 entidades federativas para consolidar la compra y obtener mejores precios por mayores volúmenes.
“La nueva estrategia de contratación, desde la consolidación extraordinaria para el segundo semestre y las del próximo año, ha generado diversas reacciones tanto del sector público como en el privado: Por ejemplo, para adquirir medicinas para el resto de este primer semestre, el Instituto de Seguridad Social del Estado de Tabasco no ha podido adquirir medicamentos porque nadie de la industria farmacéutica ha querido abastecerlo, a pesar de que cuenta con presupuesto suficiente. Esto podría afectar el servicio para aproximadamente 220 mil personas. “Entonces, el desabasto no es, en primer lugar, del gobierno federal, el abasto del gobierno federal está garantizado y está garantizado desde una compra que se planeó en 2018 y para aquellas que fueron insuficientes estamos haciendo una consolidación y una compra muy a tiempo a mitad del ejercicio… Todo lo demás se debe a resistencias de todo tipo, incluyendo las resistencias del sector privado”, apuntó.

¿Cuál es el plan de Hacienda?

Buenrostro agregó que para evitar el desabasto de medicinas, Hacienda le dio forma a siete estrategias, con las que se logrará una mejor forma de organización que permita hacer las cosas mejor, “más eficientes, reduciendo los costos y combatiendo la corrupción”. Expuso que el primer eje es el fortalecimiento de la planeación, pues su no se hace la labor de trazar todo se vuelve urgente y “cuando todo es urgente el proveedor siempre nos va a vender al precio que sea”. El segundo es el mayor impulso a las mipymes y cooperativas, es decir, las compras no sólo se les hará a las grandes empresas. La tercera línea es la coordinación de unidades contratantes, es decir, entre el público que dirige y coordina la normatividad y políticas de contratación a través de las Unidades de Administración y Finanzas (UAF) de las dependencias y entidades conforme a las mejores prácticas internacionales. La otra línea estratégica son las compras consolidadas que pueden ser de diferentes tipos, “unas que por volumen nos permitan negociar mejor el precio; y la otra que permita en todo caso tener contrataciones de responsabilidad social y que se pueda difundir o poner estrategias de contratación que fortalezcan ciertas partes económicos como son las Pymes, las Mipymes y las cooperativas”. La quinta línea estratégica es la implementación de herramientas tecnológicas para tener un sistema más transparente.
“De tal suerte que todo sea abierto, transparente, con mayor control y que cada quien sea responsable. Esto nos puede ayudar muchísimo no sólo a abatir la corrupción, sino también a ser más eficientes”.
La sexta estrategia es el cambio de cultura, pues “en este momento nos encontramos entre una gran transformación, donde muchas veces no sólo es un cambio de administración, sino es un cambio de régimen”.
“Eso sí mueve muchísimo tanto al personal desde lo más sencillo que esto ya no lo hago como siempre y ahora tengo que aprender nuevas cosas, hasta cosas más complejas como los controles y las líneas de comunicación y de operación que son más, tienen menos margen por así decir de dispersión, y entonces es más fácil tener un control sobre todo para abatir la corrupción”, dijo.
Finalmente, la séptima línea es la generación de un marco normativo flexible.
“Todo esto que estamos cambiando también lo vamos a fortalecer con algunas modificaciones en las leyes de adquisiciones y en la ley de obras”.
erc