La reforma judicial sin duda debilitará el estado de Derecho de México, pero aún así continuará la afluencia de inversión extranjera directa, gracias a ventajas competitivas que ofrece el país como la cercanía geográfica con Estados Unidos.
“Es factible que decaiga la confianza de la inversión, debido a la la incertidumbre, pero el impacto economizo preciso de la reforma es difícil de predecir, ya que dependerá de los detalles de la reforma”, es decir de la leyes secundarias, consideró el banco UBS en el reporte “En búsqueda de la claridad”.
Te puede interesar: Gabriel Yorio ha renunciado a la subsecretaría de Hacienda
Si bien el marco legal y el Estado de derecho siempre han sido un tema abierto para México, “la ventaja geográfica” del país “se mantiene firme, ya que es la única nación, además de Canadá, con entrada directa al mercado norteamericano sin tener que cruzar un océano o bien otro país”, refiere el reporte.
En este sentido, las inversiones continuarán a pesar del debilitamiento del Estado de derecho que causará la reforma, “pero no al paso que potencialmente podrían alcanzar”, lo cual deja ver que México no aprovechará bien a bien las oportunidades de inversión y de crecimiento, que plantea el proceso internacional de relocalización de empresas o “nearshoring”.

Las grandes empresas con inversiones en México, especialmente las extranjeras, tendrán la oportunidad de acudir a arbitraje internacional y la justicia de su país de origen para atender controversias legales relacionadas con sus operaciones en el país; pero las pequeñas y medianas empresas nacionales serán las más afectadas, ya que no tendrán la oportunidad de acudir a la justicia extraterritorial y estarán más expuestas a las deficiencias que pudiera tener la reforma judicial.
Te puede interesar: “Nearshoring” llega a México, pero más discretamente a lo esperado: Intercam
En este sentido, el discurso inaugural de Claudia Sheinbaum Pardo como presidenta de México será fundamental, para tener una idea de cuáles serán sus prioridades de gobierno.
“El discurso inaugural de Claudia Sheinbaum será un indicador clave para los mercados, en la medida que los inversionistas esperan ver señales respecto a si la administración dará continuidad a las mismas políticas enómicas o si adoptarán un enfoque más amigable a los negocios”, refirió UBS.
Si bien el peso mexicano conserva una ventaja respecto al dólar, las reformas constitucionales que está en proceso de apoyar el Congreso mexicano —de la mano del oficialismo—, así como las próximas elecciones presidenciales de Estados Unidos constituyen los principales impulsores del tipo de cambio en el corto plazo.
GC