Después del terremoto de 1985, uno de los sectores más afectados fue la Edificación de Viviendas y Oficinas. Las personas simplemente abandonaron las colonias Roma, Condesa, Doctores, Guerrero entre otras y tuvieron que pasar 10 años, para que regresaran los jóvenes a las mismas. Hoy hay que reconstruir la confianza Uno de los sectores más dinámicos de la economía nacional, antes de los sismos de septiembre, era la Edificación de Viviendas y Oficinas. Los precios de los departamentos en las colonias Condesa, Roma, Doctores, Guerrero han triplicado y cuadruplicado su valor en menos de 15 años y hasta antes del 19 de septiembre del 2017, eran las colonias “trendy” o de moda para vivir en la Ciudad de México La gran diferencia entre 1985 y el 2017 en el sector de Edificación, es la bajísima tasa de interés actual, frente a tasas de interés que superaban el 100% en 1985 y que hacían imposible tener un crédito hipotecario en aquél entonces. En el momento actual es gracias a los créditos hipotecarios que el mercado está creciendo fuertemente, por lo que resulta fundamental volver a construir la confianza, sobre todo entre los jóvenes, para que sigan adquiriendo vivienda nueva con crédito hipotecario, a pesar de las terribles historias que han visto y sufrido en carne propia o de amigos cercanos, producto del sismo del 19 de septiembre Pasos para la Reconstrucción En la Ciudad de México, el terremoto de 1985, fue un parte aguas muy importante en la Edificación. El Reglamento de Construcción que surgió de esa tragedia, está catalogado como uno de los mejores a nivel mundial, de tal suerte que en teoría, todos los edificios nuevos en México, deberían soportar terremotos superiores a los 8.0 grados. El del pasado 19 de septiembre del 2017 fue de 7.1 Grados En consecuencia, lo primero que se debe hacer, es un Censo detallado de todos los Edificios que hayan colapsado y de aquéllos que presenten daño estructural que los haga inhabitables. En segundo lugar habrá que deslindar responsabilidades para aquéllos edificios construidos después de 1985, bajo el nuevo Reglamento de Construcción o rehabilitados de forma posterior a dicho año. Todas las construcciones deben tener un “DRO o Director Responsable de Obra”, y una constructora que llevó a cabo la obra. La Ciudad de México, no puede decir que no hay responsables a quien pedir cuentas. Si los hay y es fundamental mandarlos llamar ante la justicia. O bien devuelven a las familias el patrimonio perdido, o en caso de que hubiera muertos, tendrán que ir a la cárcel por as muertes involuntarias provocadas por no obedecer de manera estricta el Reglamento Correspondiente De igual forma, el Gobierno de Ciudad de México, deberá ir tirando todos y cada uno de los Edificios con daño estructural, a pesar de todos los amparos que sus dueños puedan presentar, para no permitir que sean rehabilitados y revendidos en un futuro a personas que de buena fe, los compren y en un próximo temblor se caigan como sucedió el pasado 19 de septiembre, donde varios edificios con daños en 1985 fueron reparados y ahora colapsaron. Debe quedar claro, que todas y cada una de las construcciones en Ciudad de México, son seguras al no haber sufrido daño estructural en los sismos de septiembre del 2017, para que los compradores, puedan invertir de manera segura su patrimonio en propiedades Solamente cuando la Sociedad vea que los posibles culpables pagaron sus delitos, que los departamentos y casas en venta, no sufrieron daños en sus estructuras y que son habitables, la confianza podrá recuperarse de forma paulatina En 1985, los gobernantes de la Ciudad de México, no tuvieron la fortaleza suficiente para demoler los edificios que tuvieron daño estructural. En el terremoto del 2017 muchos de ellos colapsaron En 1985, las constructoras no tenían tantos edificios en venta. En el 2017, es uno de los sectores más dinámicos de la economía y en consecuencia, está en el interés del mismo gremio constructor, llegar hasta las últimas consecuencias para recuperar la confianza de los posibles compradores y que los posibles responsables, paguen con dinero y/o cárcel por no haber cumplido con el Reglamento de Construcción vigente Perspectivas: Ciudad de México debe recuperar la confianza de los compradores de inmuebles. Hay que hacerlo con transparencia, aplicando la Ley, para asegurarle a los compradores, que todos los inmuebles sin excepción, son seguros Carlos López Jones Editor en Jefe www.tendencias.com.mx Comentarios en Twitter @Carloslopezjone