La automotriz Jaguar Land Rover planea recortar cerca de mil empleos, además de parte de la producción de dos de sus plantas en Reino Unido, a causa de una baja en las ventas derivado de la incertidumbre que ha provocado el “Brexit”, además de las políticas acerca de los vehículos que utilizan diésel. Un portavoz de la automotriz en Londres negó saber cuántos puestos de trabajo se perderían, no obstante, la compañía ya aseguró cambios respecto a la producción. A través de un comunicado mencionó que en las plantas de Solihull y Castle Bromwich realizan ajustes en esquemas de producción y a escala de personal; confirmando los reveses que impactan al ramo. Sería una ocasión más a la lista de ajustes por parte de la firma, ya que a principios de año señaló una disminución temporal en la planta de Halewood, bajo la misma causa del “Brexit” y el aumento de impuestos a los vehículos diésel. En ese entonces no confirmaba un recorte laboral, como ya lo haría en Solihull y Castle Bromwich. Jaguar ha visto caer sus ventas 26 por ciento en el primer trimestre del año, asimismo, la demanda de vehículos Land Rover tropezó 20 por ciento en el mercado local también derivado de las restricciones en varios países para usar diésel. (Con información de Reuters) DHC