La compañía automotriz Ford llamó a revisión a dos millones de camionetas pick-up F-150 comercializadas en México, Estados Unidos y Canadá, debido a un defecto en los pretensores de los cinturones de seguridad en los asientos delanteros que podrían provocar un incendio.
“El mecanismo del pretensor, que funciona junto a los “airbags”, involucra una carga explosiva que bloquea los cinturones de seguridad durante un choque. Algunos pretensores en los cinturones de los asientos frontales podrían generar un exceso de chispas al desplegarse, lo que podría resultar en un posible incendio”, señaló la empresa.
Los modelos que pudieran presentar el desperfecto son los producidos entre 2014 y 2018 en dos fábricas localizadas en Estados Unidos. La llamada a revisión de este jueves responde a los reportes de humo o fuego que 23 clientes hicieron en Estados Unidos (17) y Canadá (6), y que aunque los incidentes no causaron lesiones o accidentes más graves, el defecto significa un riesgo. Ante las primeras cinco denuncias, la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en las Carreteras (NHTSA, por su sigla en inglés) inició una investigación preliminar en días pasados. Al respecto, Ford aclaró que el problema había sido identificado ya “a través de sus procesos normales de control de calidad”.
“Hemos estado cooperando con la agencia, como hacemos siempre”, dijo la portavoz de Ford, Elizabeth Weigandt.
Cabe mencionar que los pretensores, que ajustan el cinturón al pasajero, fueron fabricados por ZF-TRW y por Takata, empresa que era fabricante de bolsas de aire y cinturones y que el llamado a revisión comprende a los vehículos Ford F-150 modelos Regular Cab y SuperCrew Cab 2015-18 en América del Norte. De estos modelos, hay 1.62 millones en Estados Unidos, 340,000 en Canadá y 37,000 en México. (Con información de Agencias) erc