El Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica) atendió un caso de Influenza Aviar de Alta Patogenicidad (IAAP) AH7N3 con 150 aves implicadas en Acolman, Estado de México. A través de un comunicado, el organismo indicó que el caso fue reportado a la Organización Mundial de Sanidad Animal (OIE) un brote de Influenza. Tras recibir la notificación de alta mortalidad de aves con signos clínicos sugerentes a IAAP, por un médico veterinario, los técnicos del organismo de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader) se trasladaron al predio reportado con el fin de tomar muestras para confirmar, con pruebas de laboratorio, la presencia del patógeno. Inmediatamente, el Senasica ordenó la despoblación de la granja y las aves fueron dispuestas sanitariamente dentro del predio afectado; asimismo, se realizaron acciones de limpieza, lavado y desinfección de las instalaciones, con lo cual dio por cerrado el caso.
“Los técnicos del Senasica mantienen la vigilancia de los predios localizados en el área perifocal de 10 kilómetros a la redonda, sin que hasta el momento haya evidencia de aves enfermas o muertas”, señaló el organismo.
El Estado de México tiene una condición sanitaria de escasa prevalencia con respecto a IAAP; esta situación permite el uso de la vacuna contra el virus de la influenza aviar H7N3 en las aves comerciales o de traspatio, previa solicitud del interesado y autorización del Senasica, condición que no se dio en el predio afectado. También te puede interesar: Senasica descarta problemas de desabasto de carne de cerdo por aranceles
“Es importante mencionar que el virus no se ha identificado en granjas comerciales o aves de traspatio en el área perifocal, por lo que este evento no afecta la producción avícola estatal o nacional”, reiteró Senasica.
En el país se producen cada año más de seis millones de toneladas de productos avícolas, con más de 200 millones de aves de postura y 300 millones de pollos de engorda por ciclo. La influencia aviar AH7N3 no es transmisible al ser humano por el consumo de productos avícolas, por lo que su presencia en el predio de traspatio no implica riesgo para la salud pública. LP