El peso terminó la semana con una apreciación total de 0.97% o 18.2 centavos, para cotizar en $18.64 pesos por dólar, recuperando la mayor parte de las pérdidas de la semana previa. Para Banco Base, la apreciación de la moneda mexicana se debe a la combinación de varios factores entre los que se encuentran: La conclusión de la séptima ronda de renegociación del TLCAN. Aunque en la ronda no se lograron avances en materia de reglas de origen, oficiales de los tres países acordaron seguir colaborando para concluir las pláticas en los próximos meses. Se destaca que el Representante de Comercio de Estados Unidos, Robert Lighthizer, evitó un lenguaje proteccionista al cierre de la ronda, al decir que la mayoría de los avances en este tipo de negociaciones se logran en las últimas reuniones. La exención de aranceles por parte de Estados Unidos a México y Canadá, en el que se argumentó que es prioridad concluir con la renegociación del TLCAN en donde se abordará si las importaciones de acero y aluminio de estos países representan un riesgo para la seguridad nacional.
“Aunque el peso se apreció gracias a la exención, el nerviosismo de los participantes del mercado cambiario podría resurgir a principios de abril con la octava ronda de renegociación, pues la estrategia de Donald Trump es emplear los nuevos aranceles como medida de presión”, añade Banco Base.
En esta tónica agrega que aunque el tipo de cambio tocó un mínimo de 18.50 pesos por dólar, durante la sesión del viernes la paridad regresó a niveles por arriba de 18.60 pesos por dólar al elevarse la demanda por coberturas contra una probable depreciación del peso. Al cierre, las cotizaciones interbancarias a la venta se ubicaron en 18.6410 pesos por dólar, 1.3812 dólares por libra y en 1.2310 dólares por euro.