La Unión Europea está próxima a aprobar un nuevo paquete de sanciones económicas en contra de Rusia, como respuesta a la movilización parcial que el presidente Vladímir Putin decretó la semana pasada, así como una reacción ante su amenaza de emplear armas nucleares y los referendos en zonas del este y sur de Ucrania
De acuerdo con fuentes diplomáticas, los países del bloque están mostrando “mucha voluntad” y “determinación política” para dar luz verde a las nuevas sanciones que fueron propuestas por Bruselas.
Actualmente, los debates del bloque económico se centran en cuestiones técnicas y de viabilidad de las medidas.
Cabe mencionar que, en un primer encuentro de los embajadores de los Estados miembro, no resultó en un acuerdo sobre el paquete de sanciones, pero según explicó tras la reunión el embajador polaco, Andrzej Sados, “hay determinación política” para adoptarlo y “se hará lo máximo posible para mantenerse unidos en este ámbito”.
Las nuevas medidas incluyen sanciones al intelectual ruso Alexandr Duguin, uno de los ideólogos del nuevo nacionalismo ruso; a los dirigentes de las regiones de Donetsk, Lugansk, Zaporiyia y Jesón; al mayor accionista del fabricante de armas ruso JSC Kalashnikov Concern; a los responsables de la deportación forzada de ucranianos y a artistas o músicos que han participado en actos de propaganda del régimen de Putin.
Entre las empresas incluidas en la lista inicial destaca Alrosa, una de las principales productoras de diamantes en el mundo, o JSC Goznak, encargada, entre otras cosas, de imprimir los pasaportes que Moscú distribuye en las regiones ocupadas del Donbás, y otras relacionadas con la provisión de armas al ejército ruso y o la investigación nuclear para uso civil.
La nueva ronda de sanciones incluye también un tope al precio de su petróleo importado, un área en la que según el embajador polaco “el proceso está muy avanzado” y se han resuelto dudas técnicas; su introducción “tiene mucha mejor pinta” que hace dos o tres días”, dijo el alto diplomático de Varsovia.
El paquete incluye, por último, la prohibición a los ciudadanos europeos de poder formar parte de los consejos de administración de las empresas públicas rusas, así como un veto a la exportación de tecnología en el sector de la aviación, de la electrónica y de sustancias químicas.
Te puede interesar: Economía rusa se contrajo 3% anual en abril por sanciones internacionales
(Con información de EFE)
er