“En el corto plazo afectará la economía y la producción, pero en el mediano y largo plazo es algo que (por ejemplo) México ha venido considerando y Chile lo ha hecho eficientemente: la diversificación”, dijo el ejecutivo del Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA).Citó que México y Chile son los países con más tratados comerciales alrededor del mundo. “Tendremos que aprovechar esta coyuntura que no se sabe cuándo va a durar para que se reajuste y finalmente se diversifique”, añadió Villalobos, quien en enero próximo dejará el cargo luego de ejercer la dirección del IICA por dos periodos de cuatro años. Indicó que en este periodo, los gobiernos deben acompañar al sector privado mediante la facilitación del comercio, con reglas claras y mercados justos. Villalobos destacó que la organización se ha posicionado en los últimos años “como una institución de cooperación técnica. Le hemos recuperado su razón de ser gracias al esfuerzo de todo el personal”. En estos años, el funcionario de nacionalidad mexicana ha impulsado la formación de personal para enfrentar los retos de la agricultura y promocionar conocimientos nuevos. En 2016, el IICA capacitó a más de 32,000 personas en temas como manejo de agua, sanidad agropecuaria y otros en acciones solicitadas por los países miembros en asociación con universidades e institutos superiores. El directivo agradeció a México por albergar en varias instituciones a 965 estudiantes del continente quienes se especializan en estudios de doctorado y maestrías en temas agrícolas. El funcionario mexicano anotó que uno de los retos de la región -donde entre un 20 y 30% de su población vive en áreas rurales- es lograr que los jóvenes de zonas agrarias permanezcan en sus sitios de origen, aunque reconoció que ahí carecen de satisfactores que los retengan. “Nos interesa que los jóvenes se queden en las áreas rurales porque son las personas más proclives a adoptar conocimiento. Pero sin los estamos perdiendo lo que está ocurriendo es que se nos está envejeciendo el campo”, advirtió. El encargado del IICA señaló que desde la institución se ha incidido en el tema mediante el otorgamiento de becas para estudios en materia de agricultura sustentable, cambio climático y huella hídrica. Otro de los temas en que se debe también trabajar, es lograr que los productores se adueñen de las cadenas de valor, desde la siembra hasta la comercialización. En este punto, subrayó que el uso de las nuevas tecnologías de la información y la biotecnología es importante para dotar a los productores de herramientas que les permitan ser más productivos. De acuerdo con informes citados por Villalobos -realizados de forma conjunta por IICA con la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) y la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO)-, la agricultura cobra cada vez más importancia en la región.
“En América Latina hay países importadores netos y exportadores netos; en el sur, la economía de Argentina, Chile, Brasil, Uruguay, Paraguay rebasa el 50 por ciento del PIB”, indicó.“Son países con grandes extensiones, con una agricultura tecnificada; por eso se han posicionado internacionalmente y eso sustenta la visión de que nuestro continente es el que va a tener una responsabilidad mayor en la seguridad alimentaria del mundo”, añadió. Pero también alertó que países como México enfrentan retos como abatir su dependencia de la importación de granos y oleaginosas. Otros de los retos regionales son la adaptación al cambio climático -con necesidad de incrementar los recursos al problema, el surgimiento de plagas, manejo eficiente del agua y los suelos “Estamos haciendo un abuso del agua, el 70 por ciento del agua dulce se destina a la agricultura de una forma no muy eficiente”, dijo. Villalobos advirtió que el mayor desafió para su sucesor el año próximo será mantener la sostenibilidad financiera de la entidad debido a que Estados Unidos -el mayor contribuyente del organismo, con más del 50 por ciento- ha anunciado recortes a sus aportes.
“Hay muchos espacios para hacer ajustes, sin sacrificar la eficiencia”, sugirió, aunque también señalo que debido a los resultados, varios países de la región han incrementado su contribuciones.