La presidenta Claudia Sheinbaum Pardo condenó los disturbios del fin de semana en Los Ángeles, Estados Unidos, a causa de redadas antiinmigrantes, y convocó a los migrantes mexicanos a manifestarse pacíficamente y a no caer en provocaciones.
En su conferencia de prensa de todas las mañanas, la mandataria mexicana leyó un pronunciamiento de cinco puntos en el que también demandó al gobierno estadounidense una actuación apegada a derecho y con respeto a los derechos humanos para aplicar su política migratoria.
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“El gobierno de México reitera su compromiso inquebrantable con la protección y defensa de los derechos humanos de los mexicanos en el exterior, independientemente de su situación migratoria”, leyó Claudia Sheinbaum.
“En este sentido hacemos un llamado respetuoso pero firme a las autoridades estadounidenses para que todos los procedimientos migratorios se realicen con apego al debido proceso en un marco de respeto a la dignidad humana y al estado de derecho”, agregó la mandataria.
Las protestas en Los Ángeles comenzaron desde el viernes, después de una redada policiaca para aprehender a migrantes, lo que despertó la ira de la población migrante que, durante todo el fin de semana, salió a protestar a las calles, a bloquear carreteras y avenidas, así como a realizar saqueos de comercios. También se reportaron patrullas incendiadas por los manifestantes.
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Al respecto, Sheinbaum Pardo reprobó las expresiones violentas, al dejar entrever que le restan legitimidad y respaldo social a las causas de los migrantes. “No estamos de acuerdo con las acciones violentas como forma de protesta”, dijo la mandataria, al advertir que “la quema de patrullas parece más un acto de provocación que de resistencia”.
En su mensaje, la mandataria mexicana hizo ver que la economía de Estados Unidos necesita de la fuerza laboral de los migrantes para salir adelante y garantizó que su gobierno utilizará las vías legales y diplomáticas para “expresar su inconformidad con prácticas que criminalizan la migración y ponen en riesgo la seguridad y bienestar de nuestras comunidades en Estados Unidos”.
En la “conferencia mañanera”, Juan Ramón de la Fuente Ramírez, secretario de Relaciones Exteriores, informó que en las redadas fueron detenidos 42 mexicanos, cuatro de los cuales ya fueron deportados a nuestro país.
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“Cuatro de las 42 personas fueron deportados a México; dos de ellos ya tenían la sentencia correspondiente y los dos restantes lo hicieron de manera voluntaria”, aseguró el funcionario.
De los aprehendidos, 37 son hombres y cinco mujeres, quienes fueron llevados cuatro diferentes centros de detención dentro de territorio estadounidense.
El canciller comentó que, desde el viernes pasado cuando se realizaron las redadas, los consulados de México se pusieron a disposición de los connacionales afectados y solicitaron a las autoridades estadounidenses que permitieran al personal de los consulados ingresar a los centros de detención.
“Durante el fin de semana estuvimos en contacto con el embajador Ron Jonhnson, de Estados Unidos en México, y con el embajador Esteban Moctezuma Barragán, en Washington, quienes nos estuvieron apoyando para que pudieran nuestros agentes consulares, nuestro personal de protección, acceder a los centros de detención”, comentó De la Fuente Ramírez.
GC