Francotiradores de la policía ejecutarán a “criminales armados con fusiles” sin ser enjuiciados, indicó el gobernador recién electo de Río de Janeiro, Wilson Witzel. La propuesta, condenada ya por Amnistía Internacional, fue descrita por el recién electo exjuez, con una polémica frase:
“La policía hará lo correcto: apuntará a la cabecita y…¡fuego!”.
Tras ganar las elecciones con el 60 por ciento de los votos y con un discurso de combate a la corrupción y a la violencia, Witzel, quien también goza del apoyo del presidente Jair Bolsonaro, defendió durante la campaña la idea de dar a las fuerzas del orden la capacidad de ejecutar a criminales armados con fusiles, una situación que se da de forma frecuente en favelas y áreas dominadas por narcotraficantes. En una entrevista con el diario Estado de Sao Paulo, el gobernador electo, un exjuez federal postulado por el Partido Social Cristiano (PSC), poco conocido en la política pero apoyado por el recién presidente electo Jair Bolsonaro, indicó que la criminalidad se combatirá con el uso de francotiradores.
“Lo correcto es matar bandidos que están con fusiles. La policía hará lo correcto: apuntará a la cabecita y… ¡fuego! Para que no haya error”.
Ante las protestas de grupos pro derechos humanos, expertos en seguridad y autoridades actuales, el recién electo gobernador negó que con tal medida se incremente el número de muertes de civiles por parte la policía fluminense, acusada de abusos desde hace años por la sociedad y quien en agosto mató a 175 personas (150 por ciento más que en el mismo mes de 2017). La presencia de grupos armados que controlan territorios en Brasil, en especial en Río de Janeiro, aumentó los últimos años y disparó las muertes por homicidios, que llegaron a más de 63 mil en 2017. Sin embargo, investigaciones policiales revelaron que buena parte de las armas de esos traficantes proceden de la policía brasileña, lo que indica un alto nivel de corrupción dentro de la corporación. Witzel fue de manera sorpresiva el candidato más votado en la primera vuelta, el 7 de octubre, con ello superó a Eduardo Paes, del Democráticos (DEM) y al exfutbolista Romario (Podemos), a quienes según los sondeos daban como los favoritos para la segunda vuelta. REACCIONES La idea es defendida también por el general Augusto Heleno, futuro ministro de Defensa.
“Mucha gente hace una distorsión de eso y acaba diciendo que es una autorización para matar. Es una reacción necesaria a la exhibición ostensiva que se hace en Río de Janeiro de armas de guerra en las manos, muchas veces, de jóvenes”.
El actual ministro de Seguridad Pública, Raúl Jungmann, que dejará el cargo en diciembre próximo, criticó la propuesta y dijo que no está prevista en la legislación actual.
“No podemos tener ningún tipo de actividad que no sea legal, que no esté en las normas de la Justicia. Y, hoy, no está” el uso de francotiradores, aseveró Jungmann.
Amnistía Internacional Brasil, criticó la medida e indicó:
“La medida tiene un impacto potencial desastroso en el aumento de los homicidios y de la violencia armada en las ciudades”. “No se combate la violencia con más violencia, enfrentamientos directos y falta de respeto a la legislación vigente”, criticó la organización de derechos humanos en una nota.
Durante su campaña el polémico recién electo gobernador de Río de Janeiro, se comprometió a recuperar en cuatro años las áreas que considera más importantes:
“Río de Janeiro será la portada de todos los diarios en las áreas de salud, seguridad, educación y economía”.
(Con información de Agencias)