La reforma energética convirtió a México en uno de los polos costa afuera más atractivos del mundo, pero un segmento en particular no está despertando el interés de los inversionistas estadounidenses: las viejas refinerías, aseguró Reuters.
Explica que los trabajos de Pemex para atraer cerca de 5,000 millones de dólares que ayuden a la modernización de sus dos refinerías más grandes han sido ‘inútiles’, según dos fuentes cercanas al proceso.
La empresa está buscando un socio para su refinería en Salina Cruz, en el sur del país, así como un inversionista para completar la construcción de una unidad de coquización para procesar crudo pesado en su refinería de Tula, al norte de la capital mexicana.
Entre aquellos que han rechazado propuestas de Pemex durante el último año se encuentran las estadounidenses Valero Energy Corp y Tesoro Corp . Ambas firmas declinaron hacer comentarios.
Estas y otras compañías se frenaron por preocupaciones operacionales, políticas y de mercado, de acuerdo con las fuentes.
Ejecutivos de Pemex niegan “categóricamente” que enfrentan problemas para encontrar inversionistas. “Ha habido interés,” dijo un portavoz de la empresa el jueves. “Hemos tenido conversaciones con muchas empresas cuyos nombres no podemos revelar”, añadió.
Con información de Reuters