El Banco de México (Banxico) dio a conocer este jueves que su Junta de Gobierno se mantendrá vigilante del traspaso de los choques que han afectado a la inflación no subyacente, así como de otros elementos que pudieran afectar su comportamiento con el fin de tomar las acciones que consideren necesarias  y mantener o reforzar la postura monetaria para que el indicador converja en su meta. Al dar a conocer su última minuta de la reunión que celebró su Junta de Gobierno el pasado 4 de octubre, el Banxico señala que mantendrá una postura monetaria prudente y continuará dando un seguimiento especial al traspaso potencial de las variaciones del tipo de cambio a los precios, a la posición monetaria relativa entre México y Estados Unidos en un contexto externo adverso, así como a la evolución de las condiciones de holgura en la economía. TE PUEDE INTERESAR: Banxico deja en 7.75% la tasa de política monetaria Asimismo, señaló que los miembros de la Junta de Gobierno consideraron que el balance de riesgos para la trayectoria esperada de la inflación mantiene un sesgo al alza, en un entorno de incertidumbre en el que persisten riesgos externos e internos. Por otro lado, la institución central mencionó que un miembro consideró que suponer que existe una disyuntiva entre inflación y crecimiento que pueda explotarse de manera sistemática por un banco central, es regresar a discusiones y debates resueltos tanto en lo académico, como en la práctica.

Ramos Francia, el que votó a favor de incrementar la tasa

El Banco de México dio a conocer que Alejandro Díaz de León, Roberto Del Cueto, Irene Espinosa y Javier Eduardo Guzmán votaron a favor de mantener el objetivo para la Tasa de Interés Interbancaria a un día en un nivel de 7.75% Por el contrario, el subgobernador Manuel Ramos Francia votó a favor de subir en 25 puntos base tasa de referencia en la decisión en la se mantuvo la tasa en un 7.75%, alegando que la inflación “enfrenta un panorama complejo, en donde confluyen factores de carácter cíclico y estructural”. OC