Rebeca Grynspan, secretaria general de la Conferencia de las Naciones Unidas para el Comercio y el Desarrollo (Unctad en inglés), convocó al transporte marítimo a contribuir a agilizar la movilización de las mercancías en el mundo y a paliar las interrupciones en las cadenas de suministro, que se han provocado por la guerra entre Rusia y Ucrania y la pandemia del Covid-19.

“El mundo necesita otra vez que la industria naviera desafíe los mares agitados de la crisis”, refirió la funcionaria en la cumbre anual del Foro Marítimo Global.

Te puede interesar: Comercio entre México y EU cae en julio

Grynspan —originaria de Costa Rica— dijo que la guerra en Ucrania ha interrumpido las más importantes rutas de transporte marítimo y las cadenas de suministro.

Además, la guerra también ha desencadenado crisis mundiales de alimentos, energía y finanzas, que han disparado a niveles récord los precios de diversos bienes y servicios que pueden empujar a decenas de millones de personas en el mundo a la hambruna y la pobreza.

El transporte marítimo tiene un papel clave qué jugar en atender esta situación, ya que posee una participación de 80% en el comercio internacional de bienes, incluida la mayoría de los alimentos, los energéticos y los fertilizantes, aseguró Grynspan.

La funcionaria reconoció como un avance el acuerdo auspiciado, hace unos meses, por la ONU y Turquía para transportar alimentos y fertilizantes producidos en Ucrania, a través del Mar Negro.

“Los he visto navegar por aguas literalmente minadas. Los he visto trabajar en los puertos en medio de una zona de guerra”, dijo Grynspan, y exhortó a las empresas del sector a redoblar sus esfuerzos para desatorar el traslado de mercancías en el mundo.

“Hay mares más agitados por delante y necesitaremos de su valentía más que nunca”, aseguró la funcionaria.

La ONU estima que, actualmente, 345 millones de peonas de más de 80 países enfrentan inseguridad alimentaria aguda, derivado de la crisis por el Covid-19 y la guerra en Ucrania.

GC