La industria de manufactura mostró una marcada desaceleración en febrero, ante un menor dinamismo en el sector automotriz.
En el segundo mes del año creció 2 por ciento de manera anual, con lo cual en el primer bimestre aumentó 3.4 por ciento, 1.7 puntos porcentuales por debajo de los dos primeros meses del cuarto trimestre de 2022, según el Indicador Multidimensional de la Manufactura BBVA (IIM BBVA).
“La variación anual registrada en el segundo mes del año es la más baja desde finales de 2021 y sugiere un punto de inflexión para la manufactura este año, ante la gradual ralentización de la demanda externa”, expuso Saidé Salazar, analista del grupo financiero.
La especialista anticipó que la ralentización de la manufactura continuará hacia adelante, a medida que la demanda por bienes duraderos en Estados Unidos se debilita.
No deje de leer: Manufactura crece 4.1% en diciembre, pero pierde fuerza
“Estimamos que el mayor crecimiento del gasto privado, impulsado por las ganancias en salario real y empleo, mitigará el lento crecimiento del sector industrial. Consideramos que un entorno de mayor certidumbre y mejoras en política energética podrían potenciar el nearshoring, con beneficio para el sector industrial doméstico”, expuso.
De acuerdo con BBVA, con base en datos del IGAE, el sector automotriz muestra ya señales de debilitamiento, registrando en enero una caída mensual de 1.7 por ciento en el nivel de producción, mientras que las cifras del Bureau of Economic Analysis de Estados Unidos registran una contracción mensual de 1.8 por ciento en las ventas de vehículos y autopartes durante febrero.
Si bien otros componentes de la manufactura mostraron un desempeño más favorable a inicios de año (tales como la industria de alimentos procesados y la industria química), se anticipa que el sector manufacturero -en su conjunto- estará registrando menor dinamismo en los siguientes meses, añadió la analista.
FP