El sector privado de México expresó su desacuerdo con la decisión del gobierno de Estados Unidos para aumentar de 25% a 50% los aranceles aplicables a todos los productos importados de acero y de aluminio, ya que esta medida solo beneficia a la mercancía de China y de otros países asiáticos, a los cuales se pretende cerrar el mercado.

Por lo pronto, Alejandro Malagón Barragán, presidente de la Confederación de Cámaras Industriales (Concamin), confió en las gestiones que realiza el gobierno mexicano con sus pares estadounidenses para eliminar o reducir dichos aranceles a las exportaciones nacionales de productos de acero y de aluminio.

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“Yo tengo optimismo, porque no todos los países tienen esa negociación en Washington, Estados Unidos, y México sí la tiene”, comentó el dirigente empresarial, en entrevista de radio.

Alejandro Malagón recordó que el secretario de Economía, Marcelo Ebrard Casaubón, y el subsecretario de Comercio Exterior, Luis Rosendo Gutiérrez Romano, iniciarán el próximo viernes un viaje de trabajo en Estados Unidos, para dar seguimiento a los temas pendientes sobre el comercio bilateral.

El dirigente empresarial confió en que los funcionarios regresarán a México “con buenas noticias”; sin embargo, Malagón Barragán aceptó que durante el segundo mandato del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, los actores económicos “vamos a vivir cuatro años así, en la incertidumbre, más vale que lo entendamos y tengamos escenarios”.

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En tanto, la Canacero expresó que, lejos de poner un freno a la sobreproducción de acero y aluminio chino, las medidas arancelarias de Estados Unidos contribuirán a que China y otros países asiáticos refuercen sus medidas de comercio desleal.

“Los aranceles de 25% y ahora de 50% afectan principalmente a sus socios comerciales y a la cadena de valor en la región, ya que China y otros países de Asia aumentan subsidios y deprecian su moneda para evadir dichos aranceles”, aseguró la Cámara, en un comunicado.

Los fabricantes representados por Cancero consideraron que la mejor manera de enfrentar la sobreproducción de acero y de aluminio de los países asiáticos, así como sus prácticas de comercio desleal, consiste en trabajar de manera coordinada en la región de América del Norte, en lugar de imponer medidas que afectan a México y Canadá, que son socios de Estados Unidos, a través del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC).

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Asimismo, los industriales hicieron ver que el acero y el aluminio de México no constituyen ninguna amenaza para la producción local de Estados Unidos, ya que el comercio bilateral de este tipo de bienes es deficitario para México.

“Es importante destacar el superávit que Estados Unidos mantiene en el comercio bilateral de acero con México de 4,000 millones de dólares en productos terminados, el cual aumentar e 2025 ante la caída de las exportaciones de México, las cuales solo en abril y mayo han disminuido en 50%”, agregó Canacero.

(Con información de Imagen Radio)

GC