La dark web funciona como un mercado negro digital donde las personas pueden comprar y vender cualquier cosa, desde drogas y armas, hasta información relevante de personas, empresas y/o dependencias de gobierno.

Estas actividades ilícitas tienen graves consecuencias para la sociedad, pues pueden causar daños financieros y emocionales a las víctimas, en tanto que los malware y software maliciosos pueden poner en peligro la seguridad de empresas e instituciones de gobierno.

De acuerdo con ESET, compañía líder en detección proactiva de amenazas, en el amplio mundo de la dark web, la información es la moneda principal.

Desde datos personales hasta credenciales de acceso, cada pieza de información tiene un valor asignado por los compradores y vendedores que operan en el reino digital.

“El valor varía según una serie de factores, incluidos la rareza, la calidad y la demanda del dato. Un número de tarjeta de crédito activo con un alto límite de crédito y sin alertas de fraude asociadas, por ejemplo, puede valer mucho más que un número expirado o bloqueado”, destacó Mario Micucci, investigador de seguridad informática de ESET Latinoamérica.

Según la firma de ciberseguridad, los factores que más influyen en el precio de los datos en la dark web, son: el tipo de información, su calidad y la frescura, su demanda del mercado y el riesgo de exposición.

Los precios se relativizan según la identidad y/o entidad sobre la que se quiera obtener información, pues para el mercado no vale lo mismo la información de una persona pública que de alguien que no lo es”.

Cabe mencionar que, estudios de NordVpn proyectan que los costos de la información más común que se comercializa en este medio sobre algún individuo va del dólar hasta los 100 dólares.

  • Información financiera: Números de tarjetas de crédito, cuentas bancarias, datos de PayPal, etc. (entre 6 y 100 dólares)
  • Credenciales de acceso: Contraseñas de redes sociales, servicios de streaming, correo electrónico, etc. (entre 1 y 75 dólares)
  • Documentos de identidad: DNI, pasaportes, carnets de conducir (entre 5 y 25 dólares)
  • Historial médico: Registros de salud, información de seguros médicos (entre 1 y 30 dólares)

 “Dada la creciente prevalencia de violaciones de datos y robos de identidad, la protección de la información personal se ha vuelto una tarea de gran importancia para la salud digital”, mencionó ESET, compañía que compartió una serie de recomendaciones para las personas:

  • Utilizar contraseñas seguras y únicas para todas las cuentas.
  • Habilitar la autenticación de dos factores siempre que sea posible.
  • Tener cuidado con los sitios web y correos electrónicos sospechosos que solicitan tus datos personales.
  • Mantener el software y sistemas operativos actualizados con las últimas medidas de seguridad.
  • Utilizar un antivirus y firewall para proteger los dispositivo.
  • Ser consciente de las estafas de phishing y otras técnicas utilizadas por los ciberdelincuentes para obtener tu información.

Comprender el valor de nuestra información y tomar medidas proactivas para protegerla son pasos esenciales en la lucha contra el cibercrimen y el robo de identidad en el mundo digital actual.

Es clave recordar que tu información personal es valiosa y protegerla es tu responsabilidad”, concluyó Micucci.

er