Ocho integrantes del Pleno de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) presentaron su renuncia al Senado de la República, con efectos para el 31 de agosto de 2025, al no tener interés para participar en la primera elección de ministros, jueces y magistrados, que se realizará el próximo año.
Conforme a la reforma al Poder Judicial, que se publicó el pasado 15 de septiembre en el Diario Oficial de la Federación (DOF), los juzgadores que actualmente estén en funciones tendrán que avisar si están en disposición de concursar como candidatos en las referidas elecciones.
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El decreto que publica la reforma establece como fecha límite este miércoles.
Los ministros que ya presentaron su renuncia al Senado de la República fueron Norma Piña Hernández, presidenta del Alto Tribunal, así como Luis María Aguilar Morales, Jorge Mario Pardo Rebolledo, Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena, Alberto Pérez Dayán, Javier Laynez Potisek, Juan Luis González Alcántara Carrancá y Ana Margarita Ríos Farjat.
Las otras tres integrantes del Pleno, Yasmín Esquivel Mossa, Lenia Batres Guadarrama y Loretta Ortiz Ahlf, han manifestado que sí tienen interés en participar como candidatas para las elecciones de ministros de la SCJN el próximo año.
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En su carta de renuncia, Margarita Ríos manifestó su voluntad de rechazar su haber de retiro, esto es, el finiquito correspondiente por la terminación de su periodo como servidora pública.
De esta manera, la ministra respondió a las críticas de la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, en el sentido de que los ministros renuncian para retirarse con su haber de retiro, que es “un montón de dinero”.
La SCJN se encuentra en claro enfrentamiento con el Poder Ejecutivo y el Poder Legislativo por la reforma judicial, ya que establece un mecanismo de designación de jueces, magistrados y ministros por medio de voto popular, además de que promueve la renovación total de todos estos cargos en dos periodos de elecciones —en 2025 y 2027—, lo que significa el despido de todos esos servidores públicos que hoy están en funciones.
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La reforma igualmente extingue los fideicomisos del Poder Judicial, con los cuales se pagan prestaciones laborales, además de que se desaparece el Consejo de la Judicatura Federal (CJF) para sustituirlo por un nuevo Tribunal de Disciplina, que supervisará la función de los juzgadores, con facultades para destituirlos.
La SCJN presentó un proyecto de sentencia, que someterá a votación en breve, en el cual invalida parcialmente la reforma constitucional al Poder Judicial, principalmente en lo que se refiere a la elección de jueces y magistrados.
Sin embargo, el proyecto mantiene activa la elección de los ministros de la SCJN, por medio de voto popular.
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Mientras tanto, el Senado de la República ha confirmado la recepción de las cartas de renuncia de los ocho ministros, pero ha manifestado sus reservas.
Gerardo Fernández Noroña, presidente de la Mesa Directiva del Senado, ha advertido que las renuncias de los ministros pueden ser rechazadas, con el argumento de que los juzgadores solo quieren “llenarse las alforjas”, en referencia al cobro del haber de retiro.
Asimismo, el legislador ha dicho que el proyecto de sentencia de la SCJN carece de todo sustento jurídico y que, resuelvan lo que resuelvan los ministros, el Poder Legislativo no lo aceptará y no lo aplicará.
GC
