El fiscal general de Estados Unidos, William Barr, dio un revés sólido a los intentos de Donald Trump y su equipo legal por concretar acusaciones de fraude electoral.  Barr, quien dirige el Departamento de Justicia estadounidense, comentó el martes que no hay evidencias sólidas de fraude electoral, por lo que no habría razón para cuestionar los resultados de los comicios del 3 de noviembre, en los que todo apunta a una victoria para el candidato demócrata Joe Biden. 
“A la fecha, no ha habido fraude en una escala que pueda haber afectado los resultados de las elecciones”, comentó Barr en entrevista para la agencia Associated Press. 
Los comentarios del fiscal general caen como un balde de agua fría para Trump y su equipo de campaña. A lo largo de los cuatro años de Trump en la Casa Blanca, Barr se perfiló como uno de los principales aliados del presidente y candidato republicano, defendiéndolo con frecuencia en la arena pública de los ataques de sus oponentes políticos.  Trump no ha respondido directamente a los comentarios del fiscal. Por el momento, la única respuesta ha venido del equipo legal que está armando los casos de fraude, dirigido por su abogado Rudy Giuliani.  
“No ha habido algo que asemeje una investigación por parte del Departamento de Justicia. Nosotros hemos recabado amplias cantidades de evidencia sobre prácticas ilegales de votación en por lo menos seis estados, las cuales no han sido examinadas por el Departamento”, respondió el equipo legal de Trump en un comunicado publicado el martes. 
Oficialmente, Biden todavía no es reconocido como el próximo presidente de los Estados Unidos. Será hasta el 14 de diciembre que el Colegio Electoral emita sus votos y, si se siguen los resultados reportados, el demócrata habitará la Casa Blanca durante los próximos cuatro años.  Trump alega que hubo suficientes irregularidades en el proceso de electoral dentro de varios estados como para descalificar los resultados. En particular, su equipo acusa un manejo sospechoso de las boletas enviadas por correo y la incorporación al conteo de votos que no cumplieron con los requisitos legales para ser considerados válidos.  Las acusaciones no paran, pero tampoco las señales de una victoria para Biden. Estados en los que la contienda fue muy cerrada, como Pensilvania, Michigan, Georgia, Nevada, Arizona y Wisconsin, ya certificaron al demócrata como ganador de sus votos electorales, cerrándole puertas a Trump y a su equipo.  Además, Biden está moviendo las piezas para consolidar su equipo de trabajo. Esta semana y en la anterior presentó los candidatos de lo que sería su gabinete político y económico. También, la administración de Trump le dio acceso a los recursos para iniciar el proceso de transición política.  Si la controversia no se resuelve el 14 de diciembre con el voto del Colegio Electoral, ésta podría pasar a manos de la Corte. Si el Poder Judicial no resuelve, quedará en manos del Congreso. Dado el caso, Estados Unidos conocería quién es su nuevo presidente hasta enero.    Te puede interesar: Es oficial; Biden nomina a Janet Yellen como secretaria del Tesoro de EU (Con información de The Associated Press) cach