“Las personas que sus ingresos han sido afectados permanece alto, ante un elevado número de personas en condiciones de subempleo y dentro de la PNEA disponible, como consecuencia de que aún se mantienen suspendidas algunas actividades y permanecen restricciones en la movilidad, con el riesgo de un estancamiento ante el lento control de la pandemia”, señalaron analistas del banco en un comentario.Banco BASE estima que, tomando en cuenta la disminución en la Población Económicamente Activa (PEA), los aumentos en los niveles de desocupación y también en los de subocupación entre marzo y junio, cerca de 12 millones de mexicanos han visto sus ingresos afectados por la crisis del COVID-19. El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) reportó el miércoles el retorno de 5.7 millones de personas al mercado laboral en junio, mes correspondiente al inicio de la reapertura económica gradual del país. La tasa de subocupación bajó a 20.1% de mayo a junio. Sin embargo, la población subocupada de marzo al sexto mes aumentó en 4.6 millones, señaló Banco BASE. La tasa de desocupación subió a 5.5%. Aunque el índice es bajo en comparación con el de otros países -en Estados Unidos es de más de 11.0%-, “el dato las condiciones reales del mercado laboral, derivado de que el desempleo abierto no contempla a las personas desalentadas en la búsqueda de trabajo”. El grupo financiero estima que, si se suman la PEA desocupada y la Población No Económicamente Activa (PNEA) disponible, la tasa de desempleo en junio es de 19.11%. Te puede interesar: 5.7 millones se reincorporaron al mercado laboral tras fin del confinamiento cach