La industria del blindaje tampoco se salva de la inflación, pues registra aumentos de precios de sus insumos de hasta 100 por ciento y de hasta 25 por ciento en sus productos, según el Consejo Nacional de la Industria de la Balística (CNB).
Ignacio Baca Torres, presidente de la comisión ejecutiva del CNB, expuso que en el caso de los chalecos balísticos el incremento es de 20 a 25 por ciento y señaló que, aunque la inflación es un panorama que se tenía contemplado a raíz de la pandemia, la situación se ha agravado por el tema de la guerra.
No deje de leer: Por alta inflación, hasta 2.5 millones más de pobres en México: CEPAL
“Rusia es un importante productor de petróleo y todos los combustibles y sus derivados han tenido un gran incremento, todas las materias primas son derivados del petróleo; el transporte aéreo o marítimo también han subido mucho de precio y esto, aunado a la inflación, que se ha convertido en una especie de estanflación, provoca una mayor alza en los precios”, dijo Baca.
Destacó que, en el CNB, han buscado la forma de absorber parte del incremento en la industria del blindaje a través de la parte de la producción. Sin embargo, los aumentos les siguen pegando, y como es un servicio para salvar vidas, no pueden sacrificar la calidad.
Indicó que esta situación la sabe el consumidor privado, pero no es así con los compradores públicos, porque el privado sabe que el producto no es barato, pero las instancias gubernamentales tendrán que hacer un nuevo estudio de mercado para hacer sus presupuestos en los cuales no contemplan esta alza de precios.
No deje de leer: Menos crecimiento, mayor inflación y alta incertidumbre, pero sin llegar a recesión económica: Banxico
“Como se hacen los presupuestos desde un año antes, no consideran un aumento tan fuerte, porque es un aumento que sucedió solamente en tres meses; cuando iniciamos 2022, teníamos una inflación de 7.34 por ciento, pero con el conflicto bélico se incrementó; están cerrados los puertos en China y también en Rusia, que es el mayor productor de petróleo, igual que son productores de semillas, de tecnología, es un tema económico muy complejo”, aseguró.
Por otra parte, Verónica Damián, presidenta de la comisión de Blindaje Automotriz y de la comisión de Normas y Certificaciones, comentó que son diversos los factores que han afectado al precio de la materia prima para el blindaje.
Todo comenzó con la pandemia cuando, por cuestiones de seguridad, se despidió a mucha gente operativa a nivel mundial y, en ese periodo, aun había materiales, pero todas las compras de los gobiernos estaban destinadas al sector salud, por lo tanto, algunos segmentos no tuvieron consumo, señaló.
“Analistas financieros especulaban una recuperación en tres años, pero la realidad ha sido otra, la recuperación se dio mucho más rápido de lo esperado y nadie estaba preparado. Ahí vino la primera escalonada de precios al dispararse la demanda, no había transporte suficiente para mover mercancías de un continente a otro, puertos saturados, sin personal suficiente en puertos y plantas operativas, sin trabajadores, etc.”, aseguró Damián.
De enero a junio de 2021 el precio de los contenedores se triplicó y, sin alternativas para desplazar el material por otros medios, se tenían que aceptar esos precios que, sumados al incremento del precio del combustible, el conflicto de Ucrania y Rusia y la inflación, desataron afectaciones a la economía en general.
Basta con comparar los precios de medicamentos y alimentos que están subiendo mes con mes o la situación de la industria automotriz que está sin coches y con 30 por ciento más de lo que costaban en 2019.
Por todas estas razones, dijo, es imposible que los precios de los productos terminados, en este caso chalecos blindados, se sigan vendiendo a precios de 2019. Si esta situación continúa va a desaparecer esta industria que, además de proteger al usuario, genera miles de puestos de trabajo directos e indirectos.
Al respecto, Luis Sánchez, secretario de la Mesa Directiva del CNB, comenta que, a raíz de la pandemia y la guerra entre Rusia y Ucrania, se ha hecho más difícil la transportación de los materiales balísticos y de blindaje que vienen de otros países. Se ha encarecido todo porque el envío y todas las empresas transportistas han tenido escasez de contenedores que han provocado que el envío aumente de precio y a nosotros nos es imposible retener los mismos precios de años anteriores.
“El costo para nosotros a la hora de blindar un automóvil, se ha incrementado entre 15 o 20 por ciento, muchas empresas tienen stock, por lo que pueden mantener sus precios de 2021, pero cuando tienes que comprar materia prima ya comienzas a sentir el alza en los precios, por ende, se ve reflejado en el precio final”.
Para Federico Forastieri, presidente de la Comisión de Ética y Justicia, esta situación, que ha venido sucediendo desde el año pasado, se ha agravado por los temas ya mencionados.
“En el caso del acero, el vidrio y las fibras, han tenido incrementos de hasta 100 por ciento si no es que más”, expuso.
FP