Algunos estados -­como Jalisco y Nayarit- y municipios podrían enfrentar desequilibrios operativos durante 2024, en caso de que los ingresos que reciban del gobierno federal sean más bajos a los previstos, señaló Moody’s Local.

En un análisis, apuntó que este año, otra vez las entidades y sus ayuntamientos enfrentarán una brecha entre las participaciones (transferencias federales no etiquetadas) proyectadas y las reales, y algunos enfrentarían desequilibrios operativos, “debido a que sus presupuestos no contemplan un margen entre sus ingresos por participaciones y la estimación del presupuesto federal”. 

La agencia abundó que, aunque las entidades cuentan con el Fondo de Estabilización de los Ingresos de las Entidades Federativas (FEIEF), éste no les alcanzaría para cubrir la diferencia entre las participaciones observadas y presupuestadas. Sólo cubre cerca de 80% del total de participaciones federales.

Además, estos recursos no se distribuyen de manera inmediata, por lo que entidades que tienen baja liquidez y que tienen expectativas superiores a lo que en realidad se observa en la práctica, serán las más afectadas.

Para 2024, estimamos que (a los estados) no les alcanzará el monto presupuestado, con una diferencia de alrededor de 40 mil millones, esto es, entre 3 y 4% menos de lo que se establece en el presupuesto federal.

La presupuestación de las participaciones federales es relevante dado el peso que representan en los ingresos operativos, el cual es en promedio de 65%”, mencionó la calificadora.

En su análisis, Moody’s recordó que el gobierno federal establece el monto estimado de las participaciones (ramo 28) para cada año fiscal en su presupuesto de egresos.

Acentuó que de 2019 a 2023, las diferencias más importantes entre el monto presupuestado y el observado fueron en 2020 y en 2023.

Abundó que, en 2020, la contracción económica ocasionó que los ingresos federales cayeran y con esto las participaciones, por lo que la diferencia entre las participaciones presupuestadas y observadas fue de casi 108 mil millones de pesos, mientras que en 2023 la diferencia fue de alrededor de 72 mil millones.

Las prácticas de presupuestación son consideradas en nuestra evaluación del gobierno interno y administración. Si se tiene un escenario muy optimista y no se alcanza el monto de participaciones presupuestado, será difícil ajustar el gasto y muy probablemente se registre un déficit operativo y financiero”.

Por el contrario, agregó Moody’s Local, una estimación relativamente conservadora o que se acerque a lo observado permite que se alcance la meta, se vaya ampliando el gasto de acuerdo al ingreso disponible y se alcance el equilibrio operativo y financiero.

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