Con la pandemia del Covid-19, que obligó a varias empresas e instituciones públicas a operar vía remota y a miles de empleados a trabajar desde su casa, en el mercado de bienes raíces se dio por sentado que el segmento de renta de oficinas iba a quedar liquidado como negocio. Sin embargo, lo que ha ocurrido en los últimos meses ha sido todo lo contrario.

 “Cuando vino la pandemia y nuestros clientes empezaron a cancelarnos, tuvimos pérdidas. Pensamos que podíamos quebrar. Tuvimos una junta, en la que consideramos, hay de dos: quebramos como empresa o continuamos y le inyectamos dinero a la empresa y pensamos cómo salir”, refiere en entrevista Emilio Illanes, cofundador y codirector de Público, Inmobiliaria Iterativa, compañía de renta de oficinas.

La empresa ya tiene seis años de vida, pero este último año y medio ha sido el periodo más intenso, no solo porque la empresa ha tenido que lidiar con el impacto del Covid-19 en la economía, sino también porque hizo crecer casi cinco veces sus espacios de renta.

“Justo antes de pandemia, teníamos 5,000 metros cuadrados operando, pero ahora tenemos 23,900 metros cuadrados. Así que casi quintuplicamos el tamaño de la empresa en la pandemia, porque teníamos proyectos en proceso y porque a fines de 2020 se empieza a generar la idea de que el futuro de la oficina será el coworking”, comentó el joven empresario.

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Una tendencia en el mundo, y México no es la excepción, es el surgimiento de un nuevo tipo de empleado y que es el “nómada digital”.

Las empresas se han volcado a operar con apoyo de tecnologías de la información y las comunicaciones para hacer realidad el trabajo remoto, lo cual permite que los empleados tengan la facilidad de trabajar fuera de la empresa, ya sea desde su hogar o bien desde cualquier ciudad o destino turístico del país o del mundo.

“Hemos visto cómo la tecnología ha provocado un cambio en el pensamiento colectivo, lo que afecta los espacios físicos. Si aplicas esta idea al negocio de real estate, tienes posibilidades infinitas para innovar”, aseguró Emilio Illanes.

Nueva regla de oro en bienes raíces: la experiencia

Con base en estas nuevas tendencias de mercado, Público enfocó sus esfuerzos en diferenciarse de la competencia, con la oferta de los mejores espacios para trabajar en la Ciudad de México. Actualmente, la compañía tiene seis edificios en funcionamiento, ubicados en las colonias Polanco, Juárez, Condesa, San Miguel Chapultepec y Lomas de Chapultepec, de la capital del país.

“La tecnología ha creado un cambio en la hospitalidad. Antes, la regla de oro era ubicación, ubicación, ubicación. Ahora pensamos que ya no tanto, sino que la regla de oro es experiencia, experiencia, experiencia”, considera Emilio Illanes.

El empresario explica que, en el nuevo concepto de oficinas en renta, adquieren relevancia las amenidades o servicios complementarios que se puedan ofrecer a los clientes que alquilan las oficinas o salas de juntas para trabajar, así como las mismas características de los edificios.

“Estamos tratando que cada proyecto sea único. Nos gusta buscar edificios con valor arquitectónico, los restauramos, contratamos diseñadores, colaboramos con arquitectos y diseñadores para hacer espacios únicos”, comenta el joven empresario.

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En este sentido, Emilio Illanes explica que el barrio es el que marca la pauta para desarrollar el estilo de las oficinas y las experiencias a ofrecer al cliente. Por ejemplo, salir del edificio al café de la esquina, comprar pan en la panadería o comer en los restaurantes locales.

“Lo que a los jóvenes les gusta son las zona urbanas con amenidades, como restaurantes y parques”, refiere el empresario, quien aclara que las propiedades de Pública carecen de estacionamiento, ya que la mayoría de los clientes de sus oficinas son jóvenes sin automóvil.

Otro aspecto fundamental que ha impulsado a la compañía ha sido la disposición de una aplicación móvil para que los clientes puedan apartar los espacios de trabajo y también la flexibilidad en los contratos, en aras de que los clientes puedan rentar el tiempo que lo requieran.

Edificios híbridos, el futuro

Emilio Illanes no está solo en esta aventura de negocios, desde un inicio colabora con sus socios Andrés Martínez y Alfonso López-Velarde, con quienes ha tenido el desafío de convencer a los inversionistas sobre la viabilidad de este negocio en el contexto de “la nueva normalidad”.

Con este respaldo, Público está listo para el futuro. En un mes y medio, la compañía estrenará un nuevo edificio de oficinas y otro más en un plazo de 12 meses.

Sin embargo, el cambio en el pensamiento colectivo que menciona Emilio Illanes permite desarrollar otros segmentos de negocio, como la renta de departamentos, pero nada qué ver con el concepto de coliving o viviendas compartidas.

“En México se pueden tener edificios híbridos –de oficinas, comercios y viviendas—, puedes ofrecer experiencias diferentes en los edificios, puedes asociarte con chefs, abrir restaurantes y bares, como amenidades del edificio, y también rentar los departamentos”, dice el empresario.

El mercado ya está listo para este nuevo concepto inmobiliario y demandará oferta.

“El viajero de hoy se queda más tiempo en los destinos que visita, tiene que trabajar durante su estancia. Yo me puedo ir a una ciudad tres semanas y trabajar desde ahí y experimentar la ciudad. Así que los viajes serán más largos y las personas necesitarán otro tipo de hospedaje, como un departamento con comodidades de hotel, nosotros le apostamos a ese tipo de mercado”, concluye Emilio Illanes.

GC