La economía mexicana se encuentra en “sobre-expansión”, derivado de la demanda interna de bienes y servicios, que ya se restableció tras el periodo de crisis por el Covid-19. Sin embargo, esta demanda que se ha visto en lo que va del año genera presiones inflacionarias, que hacen difícil alcanzar la meta de 3% para la tasa de inflación general.

“Actualmente la economía se expande por encima de su capacidad productiva, generando una brecha positiva que podría obstaculizar la convergencia de la inflación al objetivo de 3%. La economía sufre un exceso de demanda interna que requiere mantener el freno monetario por un periodo necesario, a fin de abatir la presión de demanda sobre los precios”, refirió Moody’s Analytics en su reporte “Economía mexicana en sobre-expansión”.

Te puede interesar: Consumo privado repuntó en marzo

En el primer trimestre de 2023, la economía nacional sorprendió con un crecimiento de 1% en relación con el cuarto trimestre de 2022 y de 3.7% en relación con el primer trimestre de 2022, no obstante el apretamiento de la política monetaria del Banco de México (Banxico).

También fue sobresaliente el comportamiento del consumo “que no se vio afectado significativamente por las altas tasas de interés, dado que la liquidez monetaria no ejerció una restricción suficiente”, explica Moody’s Analytics.

En este comportamiento han influido las ayudas económicas de los programas sociales y las transferencias de dinero de las remesas familiares, la mayoría, desde Estados Unidos.

Esta capacidad de consumo se ha reflejado en el comportamiento del sector de servicios, el más rezagado desde la crisis por la pandemia del Covid-19, especialmente en segmentos como turismo, hospedaje y restaurantes, además del comercio en línea y la adquisición de automóviles.

Otro componente que ha contribuido a fortalecer la demanda interna ha sido la paulatina llegada de nuevas inversiones productivas, producto del proceso internacional de relocalización de empresas o “nearshoring”, agregó el reporte.

Te puede interesar: Inflación general cerrará junio en 5.2%: Encuesta Citibanamex

“Todo esto explica el avance de 1% del Producto Interno Bruto (PIB) en el primer trimestre del año con respecto al trimestre anterior, cuando solo creció 0.6% (…) El dinamismo económico se extendió al mes de abril, cuando el índice de actividad económica reportó crecimiento mensual de 0.8%, aunque reflejando con ello señales incipientes de moderación”, comentó Moody’s Analytics.

Sin embargo, ya se advierte un cambio de tendencia a partir del segundo semestre del año, producto de la política monetaria restrictiva y la menor demanda de bienes importados que se espera de Estados Unidos, que también entrará en fase de desaceleración económica en la segunda parte de 2023.

Como se recordará en sus dos últimas decisiones de política monetaria, Banxico ha dejado sin cambios la tasa de referencia en 11.25%, con la expectativa de mantenerla igual por “tiempo prolongado”, en espera de tener más datos que confirmen que la inflación tiende a disminuir.

“Es de esperar que la moderación económica se extienda en el año, cuando la economía reciba un mayor efecto de la restricción monetaria aplicada por el banco central para reducir la inflación”, refirió el reporte.

El hecho de que la tasa de referencia se mantenga alta “no es necesariamente malo, dado que la economía sufre ya de un exceso de demanda”. Que la tasa siga en 11.25% ayudará a contener el crecimiento del consumo de hogares y empresas y, consecuentemente, contribuirá a hacer retroceder la tasa de inflación.

Con una menor demanda de hogares y empresas y una desaceleración en el segundo semestre, el PIB de México cerrará 2023 con una tasa de crecimiento de 2.4%, menor a la de 3% de 2022 y de 4.9% de 2021.

GC