La economía mexicana “está fuerte y no hay signos de vulnerabilidad”, aseveró el subsecretario de Hacienda y Crédito Público, Gabriel Yorio, luego de que Moody’s Analytics advirtió que ésta ha desarrollado desequilibrios que aumentan su vulnerabilidad y que podrían crear condiciones para un ajuste brusco si no se desactivan a tiempo.

En un análisis, la unidad de Moody’s Corporation, apuntó que la economía de México comenzó a expandirse por encima de su capacidad potencial a mediados de 2022, mayormente impulsada por el consumo privado, el cual fue alentado por la prolongación de la política monetaria expansiva junto a las transferencias monetarias del gobierno, la política de aumentos al salario mínimo muy por encima de la inflación, y el creciente volumen de remesas del exterior.

“Así, mientras el consumo privado aumentó su participación en el producto interno bruto (PIB) en tres puntos porcentuales en 2021, la inversión solo avanzó poco menos de un punto porcentual del PIB”, acentuó Moody’s Analytics.

Al respecto, Yorio indicó que el enfoque en la inversión en lugar del consumo como principal motor de crecimiento “es un indicador de fortalecimiento de la capacidad productiva y de una economía más resistente a choques externos”.

Además, la inflación está en una tendencia decreciente, lo cual es un signo de estabilidad macroeconómica”, añadió el subsecretario, luego de que la agencia expuso que “la economía ha desarrollado un desequilibrio interno creciente expresado en el exceso de demanda interna”.

En su análisis, Alfredo Coutiño, director para América Latina en Moody’s Analytics, acentuó que cuando una economía sufre un exceso de demanda por un periodo prolongado, la producción nacional no alcanza a satisfacer a la demanda interna, por lo que dicho exceso tiende a acomodarse tanto en inflación como en desequilibrio externo.

Por ello, no es extraño que la inflación muestre resistencia a bajar rápidamente y que el volumen de importaciones supere por mucho el de las exportaciones”, subrayó el economista, quien también puntualizó que el creciente desequilibrio externo ha jugado un papel relevante en el fortalecimiento del peso mexicano, pues abarata el precio de las importaciones.

No obstante, alertó que su crecimiento también “aumenta la vulnerabilidad de la economía y genera un efecto de desplazamiento de la producción nacional”.

Asimismo, Coutiño previno que el programa fiscal expansivo aprobado para 2024 podría agregarle más combustible a la demanda interna y aumentar el exceso de demanda con mayores consecuencias en la ampliación del desequilibrio externo, lo que podría incrementar aún más la vulnerabilidad de la economía nacional.

En un contexto en que los desequilibrios interno y externo ya superan los niveles alcanzados durante la crisis del peso de finales de 1994, es necesario que la política económica, fiscal y monetaria, redoble los esfuerzos para reducir la vulnerabilidad de la economía y evitar el riesgo de un ajuste económico precipitado”, concluyó el especialista de Moody’s Analytics.

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De acuerdo con Yorio, el sistema financiero se encuentra en una posición fuerte, con un sector bancario bien capitalizado y niveles de crédito interno manejables, mientras que la política de tipo de cambio flotante permite una mayor adaptabilidad y resiliencia frente a fluctuaciones externas, reflejado en la apreciación del peso durante la actual administración.

El funcionario mexicano también resaltó que las reservas internacionales se encuentran en máximos históricos, lo que proporcionan un colchón considerable contra choques externos.

Estos factores, en conjunto, muestran una economía mexicana más robusta y menos susceptible a crisis como en años anteriores”, dijo.

Finalmente, el subsecretario mencionó que, en términos de déficit comercial, la situación ha mejorado significativamente en los últimos 20 años.

Ejemplificó que, en 1994, el déficit de la balanza comercial era del 3.3% del PIB, mientras que al tercer trimestre de 2023, el déficit comercial acumulado fue sólo del 0.6% del PIB, con una balanza no petrolera que presenta un superávit.

Esto indica una mayor diversificación y solidez en el comercio exterior. […] Por estas razones, la economía mexicana es la doceava más grande del mundo”, contestó Yorio.

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