La institución financiera BBVA Bancomer resaltó que la disciplina sobre el manejo de las finanzas públicas ha sido clave para la estabilidad macroeconómica del país. El economista principal de BBVA Bancomer, Arnulfo Rodríguez expuso que tan solo en este año los esfuerzos de consolidación fiscal del gobierno federal se reflejan en un balance primario positivo de 0.4 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) mientras que al año próximo también se anticipa un balance positivo de 0.9 por ciento. Opinó también sobre la deuda pública, medida por los Requerimientos Financieros, que se se ubicará en 48 por ciento al finalizar el año en curso y en 47.3 por ciento del PIB al año próximo, promedios que cambiarían la trayectoria al alza que por 10 años ha seguido este concepto más amplio de la deuda del país. Una parte importante de la baja en la deuda pública se debe al pago de remanentes del Banco de México de 1.5 por ciento del PIB, la apreciación cambiaria respecto al cierre del 2016, y los esfuerzos de consolidación fiscal. Otro de los beneficios de la reforma fiscal implementada por la actual administración está en el incremento de la recaudación tributaria como por porcentaje del PIB que pasó de 8.4 por ciento a 13.9 por ciento del 2012 al 2016, afirmó Rodríguez. Por el contrario, señaló, la participación de los ingresos petroleros en el balance público disminuyó de 39.4 a 16.3 por ciento como proporción del PIB en igual lapso de tiempo. En ese sentido mencionó que el aumento de los ingresos tributarios en el orden de 81.4 por ciento ayudó para mantener la calificación soberana de México que de otra manera hubiera estado en riesgo. Pese a los esfuerzos, el experto consideró deseable una nueva reforma fiscal que disminuya la carga tributaria a las empresas y amplíe la base de contribuyentes y de consumo gravados, medida que reconoció necesaria ante la presión sobre el gasto público debido a las pensiones públicas, las participaciones federales y el costo de la deuda. A R