La comunidades rurales y semirurales son las que van a pagar el pato de la salida del Banco del Bienestar del mercado de remesas, señaló BBVA en un reporte.
El pasado 21 de marzo, la institución financiera del gobierno informó que dejó de recibir formalmente envíos de remesas. Financiera para el Bienestar (anteriormente Telecomm) será la entidad gubernamental federal encargada de este tema.
“La pérdida gradual en su cuota de mercado podría explicar -en parte- esta decisión. En 2018 su participación fue de 4.1 por ciento, y para 2022 se estima que fue de 2.4 por ciento”, expuso Juan José Li Ng, analista del banco.
De acuerdo con el grupo financiero, en 2022 se estima que 36.5 por ciento de las remesas pagadas por el Banco del Bienestar se entregaron a través de sus sucursales y el restante (63.5 por ciento) a través de instituciones de Ahorro y Crédito Popular y Cooperativo (L@Red de la Gente).
Las sucursales de la institución financiera del gobierno y su red de corresponsales tenían una cobertura de 935 municipios en 2021, y en algunos de estos eran la única institución que ofrecía servicios financieros y de liquidación de remesas.

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“La menor presencia de puntos de pago puede impactar en un mayor costo de traslado para las personas que cobran las remesas, principalmente en localidades rurales y semirurales, que tendrán que desplazarse a otros municipios y centros urbanos”, expuso.
Ejemplificó que en la región de la mixteca de Puebla gran parte de los municipios tuvieron un Grado de Intensidad Migratoria Muy Alto o Alto en 2020, de acuerdo con datos del Consejo Nacional de Población (Conapo, 2021).
Al comparar los dos mapas se observan varios municipios de la región con Muy Alto (e.g. Axutla, Chila de la Sal, Ahuehuetitla) o Alto Grado de Intensidad Migratoria, pero con baja intensidad en el pago de remesas.
Debido a la falta de infraestructura, y algunas veces a la comodidad para realizar compras, muchos habitantes en zonas rurales y semirurales de esta región deben desplazarse a otros municipios y centros urbanos para realizar el cobro de sus remesas.
Por este motivo destacan municipios como Tehuitzingo, Piaxtla y Tulcingo que tienen un elevado índice relativo en el cobro de remesas en comparación a su tamaño de población. En esta región destaca Izúcar de Matamoros como urbe que concentra el pago de remesas, ocupando la cuarta posición estatal con 147.2 millones de dólares en 2022, explicó el especialista.
Un caso similar ocurre en el municipio de Tehuacán, segundo municipio con mayor recepción de remesas en Puebla, que concentró 202.9 millones de dólares durante 2022. Muchos hogares de los municipios colindantes y de la región de la Sierra Negra se trasladan a esta urbe para el cobro de sus remesas.
Así, con la salida del Banco del Bienestar del mercado de las remesas, en especial con las transferencias realizadas a través de las instituciones de Ahorro y Crédito Popular y Cooperativo, es posible que se presenten cambios en la intensidad del pago de estos recursos en toda la República Mexicana, aumentando la concentración en algunos municipios y centros urbanos con puntos de pago, consideró BBVA.
Siguen en ascenso
En febrero, el país recibió cuatro mil 348 millones de dólares por concepto de remesas familiares, lo que significó un aumento de 11.2 por ciento a tasa anual. Así, estas divisas que ingresan a México acumulan una racha de 34 meses consecutivos al alza, desde mayo de 2020.

En el mes se registraron 11.6 millones de operaciones para el envío de estos recursos (10.9 por ciento más). La remesa promedio fue 375 dólares, muy cercana a lo recibida en el pasado mes de enero y en febrero de 2022, pero por debajo de lo observado de marzo a diciembre del año pasado, cuando se ubicó en 393 dólares por operación en promedio.
fp