A sólo unas semanas de terminar el año, las expectativas para el 2017 cada vez se ven más retadoras. Este ha sido un año complicado y 2017 no se ve mejor. Si bien, hay muchas preguntas y pocas respuestas sobre las políticas que Trump decidirá realizar, hay otros factores que también complican el panorama para la economía mexicana. En el crecimiento económico será donde más se recientan las decisiones de Trump. La mayor incertidumbre genera que varias decisiones de consumo e inversión sean pospuestas. Asimismo, no se vislumbra un buen panorama para el sector industrial mexicano dada la desaceleración en la industria estadounidense (proceso que comenzó previo a la elección de Trump), el modesto crecimiento en el comercio global y la caída de la producción petrolera en México. También, las exportaciones estarán afectadas por las medidas más proteccionistas en EUA (aunque se espera que los precios del petróleo se recuperen). Ante esto, las expectativas de crecimiento del consenso (1.8% en la última encuesta de Citibanamex) ya incorporan una desaceleración económica; aun así considero que ésta podría ser mayor (sin llegar a una recesión). Inflación, Banxico y el nuevo Gobernador. El alza en el salario mínimo, la liberalización de los precios de la gasolina y la moneda persistentemente por encima de 20 pesos por dólar, han elevado las expectativas de inflación para 2017. Este 15 de diciembre, Banco de Mexico decidió subir la tasa de interés en 50 puntos base a 5.75%, argumentando sus preocupaciones por la inflación. Con esto, el banco central acumula un alza de 275 puntos base desde diciembre pasado, el aumentos más agresivo desde que se usa la tasa de referencia. Con la inflación subiendo, las tasas en 2017 seguirán aumentando aunque en menor magnitud. Adicionalmente, en Banxico aparece otro cambio: el nuevo gobernador. Agustín Carstens, recientemente, anunció su renuncia para unirse al BIS en julio de 2017. Si bien, Banxico es una institución sólida y depende de la Junta de Gobierno, el factor más relevante en esta elección es la permanencia de la autonomía de Banxico. Así, el éxito de este nombramiento dependerá de que tanto sea o se perciba independiente de la actual administración. Esto difícilmente tiene que ver con Trump. El peso, la variable que todo le afecta. En 2016 la gran mayoría de los episodios de riesgo y volatilidad en los mercados, sin importar el origen, tuvieron un efecto negativo en la moneda. Actualmente y hacia adelante, no veo factores específicos que pudieran revertir esta dinámica. Por lo tanto, considero que la volatilidad en el peso se mantendrá en 2017, con dificultades para apreciarse sustancialmente. No obstante, tampoco veo un escenario más pesimista como para que la moneda se mantenga persistentemente encima de 22 pesos por dólar. Los retos del gobierno. No sólo las negociaciones con la Administración Trump serán el principal reto del gobierno, sino también el ajuste fiscal, el desempeño de la clase política y la capacidad del gobierno para generar confianza en los inversionistas. Recientemente, Fitch se unió a S&P y Moody´s y colocó el panorama de la calificación crediticia en negativo. Esto, aunque no es un recorte de calificación, sí es una llamada de atención que poco tiene que ver con el resultado de las elecciones en EUA. La preocupación común de las tres calificadoras es la sustentabilidad de las finanzas públicas, dado el acelerado crecimiento de la deuda pública en los últimos años. Por lo tanto, los esfuerzos, que tendrán que ser muy agresivos si se quiere 1 Todas las opiniones aquí expresadas son a título personal y no representan la visión de Citibanamex ni de ninguna otra Institución. reducir el déficit fiscal, serán la clave para poder evitar un recorte en la calificación. Con miras a 2018, el desenvolvimiento de la política local jugará un papel relevante en 2017, en especial después de las sorpresas de 2016 y el movimiento “antiestablishment” global. No me gusta terminar mis columnas (y menos las cercanas al fin de año) con un tinte negativo; sin embargo, posiblemente nos tengamos que preparar para un año nuevamente volátil, sensible y con mayor incertidumbre. En gran parte, el panorama de México estará marcado por Trump; sin embargo, no todo será respuesta de esto. México tiene que estar bien preparado para negociar, enfrentar y/o pelear contra EUA, pero también para realizar los cambios que el país requiere (fiscales, estado de derecho, anti-corrupción, entre otros) para sortear lo mejor posible el 2017. Así que el balance del siguiente año estará también marcado por cómo decidamos prepararnos y enfrentarnos dentro de casa.