En aras de tener una mejor relación con Estados Unidos, el gobierno de Andrés Manuel López Obrador debe conformar un equipo de trabajo amplio, que involucre a más funcionarios públicos, y no dejar únicamente al canciller a Marcelo Ebrard Casaubón como cabeza visible para atender la agenda binacional.

“Marcelo Ebrard es el zar de las vacunas y el zar de migración y el canciller”, lo que no es práctico ante la diversidad de temas que están involucrados en la relación de México con Estados Unidos, aseguró Rafael Fernández de Castro, director del Centro de Estudios México-Estados Unidos (UCSD).

En una videoconferencia, como parte de la 84 Convención Nacional Bancaria —que organiza la Asociación de Bancos de México (ABM)—, el académico hizo ver que el gobierno del presidente estadounidense, Joe Biden, se caracteriza por ser más institucional y formal, a diferencia de la administración de Donald Trump, que funcionó con decisiones más improvisadas.

En este sentido, México debe ajustarse a esta forma de actuar y conformar un grupo de trabajo, un “US team”, que atienda los temas de seguridad, migración y comercio, entre otros, con los funcionarios públicos adecuados, que demuestren ser interlocutores para llevar a la práctica los acuerdos que se tomen entre los dos países, recomendó Fernández de Castro.

El académico —que compartió el panel con especialistas como Richard Haass, presidente del Consejo de Relaciones Internacionales, y Duncan Wood, vicepresidente del instituto Woodrow Wilson Center— consideró que la administración de Joe Biden asume la relación con México como un asunto relevante en su agenda internacional.

“Con sus 36 años de senador y sus cuatro años de vicepresidente, Joe Biden ha demostrado tener conocimiento suficiente sobre Canadá y México, por lo que está consciente del papel estratégico que representan estos dos socios para su país”, aseguró el académico mexicano.

Con base en este punto, sería deseable que la administración de López Obrador aproveche esta oportunidad para sacar adelante temas de interés común como la migración, el comercio, la seguridad y la vacunación contra el Covid-19. “La pelota está en la cancha de México”, resumió Fernández de Castro.

En su participación, el académico mexicano hizo ver que Estados Unidos ha tomado decisiones relevantes para el crecimiento económico de ambos países, como la autorización del paquete de estímulos económicos por 1.9 billones de dólares.

Estos recursos beneficiarán los mexicanos radicados en Estados Unidos, una población que ha quedado desprotegida en el contexto de la pandemia del Covid-19, debido a que el paquete de estímulos incluye apoyos para las minorías de ese país.

Ante estos hechos, sería deseable que México asuma una actitud más activa en su relación con Estados Unidos para atender de manera conjunta los problemas comunes, tales como la migración, el cambio climático y la industria energética.

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“Biden es un transformador más que un revolucionario. Biden dará tiempo para la entrada de energías limpias y ahí hay tiempo, no veo un choque de trenes entre los dos países” pero México sí debe hacer su tarea al respecto en su territorio, concluyó Fernández de Castro.

GC