El director de la Comisión Federal de Electricidad, Manuel Bartlett, resaltó en la semana que regresarle a la CFE el carácter de “empresa pública” no puede considerarse monopolio, pues se trata de una compañía estratégica.

Durante la conferencia matutina de Andrés Manuel López Obrador (AMLO) del lunes, el funcionario abundó que la reforma energética de 2013 otorgó ventajas a empresas privadas, en contra de la Comisión, pues obliga a la empresa a adquirir la energía a privados, “garantizándoles así su rentabilidad”.

Agregó que también establece reglas de despacho económico, en las cuales se otorgan “todas” las ventajas a las empresas privadas.

Además, existen esquemas como el autoabasto ilegal en el que se concentran los grandes consumidores que quedan fuera del mercado, como monopolios con despacho automático y que impiden a la CFE el acceso a los grandes consumidores”, expresó.

Bartlett agregó que este sistema establece la priorización del interés privado sobre el interés público y nacional, el cual es representado por CFE.

Acentuó que a fin de “atender esta problemática”, el gobierno federal propuso reformar el texto constitucional.

En ese sentido, manifestó que en el artículo 28, cuarto párrafo del texto vigente, se establece que la planeación y el control del sistema eléctrico nacional no constituyen monopolios, sino actividades que el Estado debe ejercer de manera exclusiva como áreas estratégicas.

No obstante, añadió, en la Constitución no se define cuál es el objetivo de la planeación y el control y, por lo tanto, “el sistema eléctrico vigente se desarrolla al margen de toda planeación y en ausencia de la atribución del control del Estado”.

“En ese vacío, son las leyes secundarias las que regulan el sistema sin obedecer a un principio constitucional que se propone establecer.

Para evitar este vacío, se propone añadir que la planeación del control del sistema eléctrico nacional, vigente en nuestra constitución, tenga un objetivo específico: preservar la seguridad y autosuficiencia energética de la nación, y proveer al pueblo de la electricidad al menor precio posible, evitando el lucro para garantizar la seguridad nacional y soberanía energética, mediante la empresa pública del Estado”, explicó.

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El funcionario indicó que, de esta forma, “se aclara que el responsable del sistema eléctrico nacional y de su control es el Estado mexicano, adicionando las funciones que debe tener la atención a todos los estados sociales y acceso a todo el pueblo de México”.

Este principio de planeación y control, bajo la responsabilidad de la nación, la ley de Estado, así como los objetivos específicos que lo deben guiar, deberá haberse reflejado en la legislación secundaria”, concluyó.

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