El gobierno federal ha enviado al Congreso de la Unión una nueva propuesta de reforma de telecomunicaciones, que entre sus cambios principales, plantea la creación de una Comisión Reguladora de Telecomunicaciones (CRT), que se encargará de supervisar al mercado de telecomunicaciones y radiodifusión.
Sin embargo, el nuevo organismo —que sustituirá al actual Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT)— no será autónomo sino que funcionará bajo la influencia de la Agencia de Transformación Digital y Telecomunicaciones, que a su vez depende del Poder Ejecutivo.
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Así lo informó José Antonio Peña Merino, jefe de la Agencia de Transformación Digital y Telecomunicaciones, al hacer una exposición sobre los cambios principales que se hicieron a la iniciativa original para promulgar la nueva Ley en Materia de Telecomunicaciones y Radiodifusión.
Peña Merino —conocido como Pepe Merino— aseguró que esta nueva versión de la reforma contiene las propuestas recogidas de la serie de consultas a especialistas y empresarios que se hicieron hace unas semanas.
El funcionario insistió en que el nuevo proyecto revisado ya fue enviado al Congreso de la Unión, con la expectativa de que sea analizado y discutido en el periodo extraordinario de sesiones que se desarrolla esta semana.
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En la conferencia de prensa de todas las mañanas de Presidencia de la República, José Antonio Peña explicó que así como se creará la CRT para supervisar todo lo que tiene que ver con la operación técnica del mercado de telecomunicaciones y radiodifusión, por otro lado, la nueva Comisión Nacional Antimonopolio (CNA) se ocupará de supervisar todo lo que tiene que ver con la competencia económica entre las empresas de telecomunicaciones y radiodifusión.
Explicó que la CRT tendrá “independencia técnica, operativa y de gestión” y que estará conformada por cinco comisionados, nombrados por el presidente en turno y ratificado por el Senado de la República.
Peña Merino también informó que la reforma confirmará el proyecto original en el sentido de prohibir la publicidad política de gobierno extranjeros en radio y televisión, así como en canales de internet.
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El proyecto de reforma también plantea defender los derechos de las audiencias, a través de “defensores de las audiencias”, códigos de ética, y el compromiso de los medios de comunicación de “distinguir entre información y opinión”.
Asimismo, el funcionario dijo que se eliminó el polémico artículo relativo a que las autoridades podían solicitar que se suspendiera de internet contenidos en particular, para que no se malinterpretado como un acto de censura a la libertad de expresión.
“No hay ninguna censura, nunca la hubo y no la habrá jamás”, aseguró Peña Merino.
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En su exposición, el funcionario aseguró que la nueva Ley en Materia de Telecomunicaciones y Radiodifusión garantizará el derecho de todos los mexicanos para tener servicio de internet y de telefonía móvil, además de que el Estado mexicano también será un prestador de servicio de internet.
Además, los chips de los teléfonos celulares solo se podrán vender a los usuarios si presentan una identificación oficial, de manera que los chips no pueden ser activados “si no están asociados a una persona que se haya identificado”.
GC
