La regularización de los autos usados importados, conocidos como “autos chocolate”, constituye un revés para la recuperación de la industria automotriz establecida en México, ya que se permitirá la circulación de vehículos que no pagaron impuestos de importación y que además ingresan al país en mal estado.
“Desde que se habló de esto en junio, aumentaron en 20% las importaciones ilegales de estos vehículos, todos buscando el momento de la regularización. Esto pegará a la industria sobre todo en el mercado local”, aseguró José Zozaya Délano, presidente la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA), en entrevista con Radio Fórmula.
Este miércoles, el presidente Andrés Manuel López Obrador adelantó que el próximo fin de semana firmará el decreto que reconocerá la presencia legal de los “autos chocolate” en posesión de las personas físicas que residan en siete estados del norte del país, con lo que cumplirá una oferta que hizo sobre este tema en junio pasado en una gira por Baja California.
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A cambio, los propietarios tendrán que pagar un derecho y tendrán que proporcionar sus datos y los del vehículo para conformar un padrón. La intención de las autoridades consiste en apoyar a las familias de escasos recursos que compraron esos vehículos, a un precio menor que uno nuevo, y también conformar un registro de esas unidades por razones de seguridad pública.
Los “autos chocolate” son vehículos ligeros o camionetas usadas, la mayoría de ellos procedentes de Estados Unidos, que llegaron al país sin pago de impuestos, es decir de contrabando.
Sin embargo, la industria automotriz establecida en México vive momentos de dificultad ante las bajas ventas de unidades nuevas en el mercado interno. En septiembre, los consumidores nacionales adquirieron 76,930 autos ligeros nuevos, cifra 1.66% menor a la de agosto pasado y también 1.13% por debajo de lo que se comercializó en septiembre de 2020.
En este sentido, José Zozaya opinó que “hacer legal lo ilegal no es el camino adecuado” para ayudar a las familias de menores recursos.
El dirigente empresarial argumentó que el inminente decreto a favor de los “autos chocolate” afectará al mercado de autos usados del país, ya que se van a devaluar los vehículos que son legales, sobre todo los de modelos y años parecidos a los que se van a regularizar.
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“Alguien que compró su auto usado con mucho esfuerzo de esos años (o modelos) se dará cuenta que ahora tendrá menor valor su auto porque se saturará el mercado”, hizo ver José Zozaya.
Además, reiteró que, por lo general, “los autos chocolate” incumplen con las normas mexicanas de seguridad y de protección ambiental. En suma, se permitirá la circulación de autos “chatarra”, lamentó Zozaya Délano. (Con información de Radio Fórmula)
GC
